El extraño comportamiento de once alumnos de Bucaramanga llamó la atención de los profesores de un colegio de la ciudad. Luego los puso en alerta el dolor de cabeza, malestar general y náuseas que empezaron a tener los estudiantes dentro del aula de clase. Un alimento que consumieron generó la emergencia que los hizo terminar en un hospital.
De acuerdo con un informe emitido por la administración de la capital de Santander, los protagonistas adquirieron a través de las redes sociales un producto que contenía alucinógenos. Una vez sintieron los primeros síntomas de la intoxicación que les provocó el alimento, les confesaron a los directivos que se trataba de brownie con marihuana.
La primera decisión que se tomó fue avisarles a las unidades de la Policía de Infancia y Adolescencia para que tomaran cartas en el asunto. Después llamaron a cada uno de los padres de familia con el objetivo de que hicieran presencia en la institución dado que los menores de edad debían ser trasladados a un centro médico por las complicaciones.
Los once estudiantes llegaron al servicio de urgencias de la Unidad Materno Infantil Santa Teresita. En ese sitio reiteraron la versión que entregaron en el colegio. Así lo confirmó la subsecretaria de Salud de Bucaramanga, Laura Milena Parra, luego de que el caso hiciera estruendo en toda la ciudad en la tarde de este viernes.
“En este centro de salud ingresaron los alumnos y, tras la valoración, aseguraron que habían consumido un brownie de marihuana. Se activó el sistema de vigilancia epidemiológica para adelantar la investigación”, comentó la funcionaria. En cuanto al estado de salud de los jóvenes, solo uno de ellos continúa bajo observación.
Mientras que la Secretaría del Interior advirtió que el grupo de investigación de la Policía Nacional está recopilando información para dar con el paradero del establecimiento comercial donde los estudiantes adquirieron el producto. Luego les aplicarán los correctivos con el objetivo de penalizar las faltas que cometieron.
“Este gobierno municipal hace un llamado a los padres de familia para la vigilancia de sus hijos y trabajar de la mano con las instituciones educativas y la Policía en la prevención de este tipo de actos”, concluyó en un comunicado la administración donde aclararon que, contrario a las especulaciones, fue un producto que los mismos estudiantes ingresaron al colegio.
Otro caso
Una nueva problemática se está presentando en los colegios de Santander, donde en las últimas horas, por un desafío conocido como ‘Reto del Viagra’, un grupo de estudiantes tuvo que ser hospitalizado tras mostrar signos de intoxicación por el consumo de dicho medicamento.
El caso se presentó en el Instituto Técnico Isaías Ardila Díaz, en el municipio de Mogotes. Allí, estudiantes de grado octavo (de 13 y 15 años) de manera voluntaria decidieron mezclar la “pastilla azul” con gaseosa, siguiendo un video que se ha viralizado en la red social TikTok.
“Cinco estudiantes se pusieron de acuerdo para hacer esto y lo confesaron. Uno lideró y envió a comprar el medicamento con otro estudiante que estaba afuera, que ese día no había asistido. Lo ingresaron a la institución, lo mezclaron con gaseosa y lo ingirieron”, explicó ante los medios de comunicación el rector del plantel educativo, Gerardo Rodríguez.
Aunque del reto participaron cinco jóvenes, otros dos también resultaron afectados tras ser engañados por sus compañeros. La ingesta de esta pastilla les provocó malestar y otros signos de intoxicación, por lo que tuvieron que ser sometidos a la valoración médica.
“No sabemos quién, pero al parecer otra persona le echó en el jugo la pastilla a estos dos muchachos; la bebida fue comprada por fuera de la institución. Estamos investigando quién es esa persona, porque los cinco estudiantes que hicieron eso de forma voluntaria insisten que no ofrecieron la mezcla a nadie más”, agregó el rector.