Hay preocupación en el departamento de Santander, tras la alerta que emitió la Procuraduría General de la Nación, en la cual se informa sobre el incremento en los niveles de mercurio en el río Suratá, debido al desarrollo de actividades relacionadas con la minería ilegal.
De acuerdo con el Ministerio Público, el uso de este químico en la región ha aumentado como consecuencia de la falta de acciones contundentes contra la minería ilegal por parte de las autoridades.
“La Procuraduría ha evidenciado con suma preocupación la inacción del estado frente a la contaminación con mercurio en diversas fuentes hídricas como resultados de actividades mineras ilegales, no solo en el caso del río Suratá y de las fuentes hídricas de Santander sino también en el Bajo Cauca en donde se ha aumentado el área deforestada”, señaló Gustavo Guerrero, procurador delegado para asuntos ambientales.
La Procuraduría aseguró que en reiteradas ocasiones han solicitado a las regionales y nacionales atender esta situación, que está generando impactos socio ambientales, contaminación de fuentes hídricas, el incremento de la deforestación y afectaciones a ecosistemas estratégicos tanto en Santander como en otras regiones del país.
“La solución para frenar de manera eficaz esta actividad ilícita de alto impacto, requiere de la coordinación entre las diferentes autoridades y el cumplimiento de las funciones constitucionales y legales”, agregó la entidad.
El río Suratá abastece de agua a Bucaramanga, además de los municipios de Floridablanca, Girón, Piedecuesta, Vetas, California, Suratá, Matanza, Charta, Tona, El Playón, Rionegro y Lebrija.
Con el propósito de monitorear y controlar el uso del mercurio sus impactos socio ambientales, el ente de control convocó a más de 50 entidades estatales, entre entes de control, corporaciones, autoridades ambientales, organizaciones, universidades, para consolidar una estrategia nacional de articulación interinstitucional.
La reunión, liderada por el Ministerio Público, se realizará el próximo 26 de enero en la capital de la República, esto con el objetivo de garantizar la protección del ambiente y los derechos colectivos de las comunidades, mediante la reducción y eliminación del uso de mercurio, evitando así la irreversible afectación de los ecosistemas y salud de los habitantes de los territorios que se benefician de sus servicios ecosistémicos, así como frenar la deforestación generada por esta actividad ilegal.
Entre los citados se encuentran entes de control, autoridades nacionales y territoriales y los jefes de las carteras ministeriales de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Minas y Energía y Agricultura y Desarrollo Rural.
“Este uso del mercurio en actividades mineras ilícitas está ocasionando un daño irreversible sobre el ecosistema de páramo, pero también amenazando la salud de todos los santandereanos. Por esta razón continuamos instando a las instituciones públicas a la construcción del plan de acción urgente indispensable para eliminar el uso del mercurio en las actividades mineras para luchar por la descontaminación de las fuentes hídricas y evitar las actividades mineras ilegales y que dichas autoridades públicas ejerzan las facultades que tienen de policía administrativa y de control ambiental para atacar este tipo situaciones”, aseveró el funcionario.
Entre tanto, el Acueducto Metropolitano de Bucaramanga (AMB) entregó un parte de tranquilidad, ya que los controles de tratamiento del agua en la planta de Bosconia son muy rigurosos y con ello se asegura que el líquido llegue en condiciones óptimas a los hogares del Área Metropolitana de Bucaramanga.