Los Santos, Santander, el municipio epicentro del sismo que sacudió a Colombia en la madrugada de este viernes, es el lugar del país donde más tiembla. El más reciente fue de 5,9 en la escala de Richter, a 151 kilómetros de profundidad.
Este municipio, habitado por aproximadamente 12.000 personas y ubicado en el cañón del Chicamocha, a unos 62 kilómetros de Bucaramanga, es además el segundo nudo sísmico del mundo, después de Hindu kush, en Afganistán.
En Los Santos puede temblar hasta 20 veces en un día, por lo cual muchos de sus habitantes ya están acostumbrados a los constantes movimientos telúricos. Incluso, hay quienes ni siquiera sienten los frecuentes temblores.
Pero aunque el municipio es epicentro de muchos de los sismos que ocurren en el país, los cuales se sienten fuertemente en otros departamentos, como Cundinamarca, Caldas y Antioquia, sus habitantes a veces no los perciben debido a la profundidad a la que ocurren.
En ocasiones, se enteran por las noticias, redes sociales o porque alguien los llama a preguntarles si está todo bien.
No obstante, Los Santos también ha sentido la inclemencia de los sismos, como en 2015, justamente un 10 de marzo, pero de hace ocho años. Ese día, un movimiento telúrico de 6,6 en la escala de Richter sacudió al caluroso municipio de calles angostas.
Los Santos, fundado en 1750, tiene una extensión total de 242 kilómetros cuadrados, está ubicado a 1.310 metros sobre el nivel del mar y tiene una temperatura medida de 21 grados centígrados.
¿Por qué tiembla tanto en Los Santos y Santander?
De acuerdo con el Servicio Geológico Colombiano, posiblemente exista una antigua zona de subducción (inserción de una placa debajo de otra) con sismicidad alta desde Boyacá hasta Norte de Santander.
Es por ello, según un análisis de la Red Sismológica de Colombia, que entre 2001 y 2005 ese territorio registraron 18.000 movimientos sísmicos, con una sismicidad profunda de entre 70 y 200 kilómetros, tal como el sismo de esta madrugada.
Sin embargo, el otro componente de la alta sismicidad, sería la existencia del llamado Nido Sísmico de Bucaramanga, uno de los más activos del planeta, el cual se daría como “consecuencia de una alta concentración de esfuerzos causada por la convergencia hacia el bloque andino de las placas litosféricas mayores de la región (Caribe, Nazca, Suramérica)”, detalló el investigador Carlos Coral Gómez.
Así las cosas, todos esos factores inciden en el elevado número de temblores, donde la inmensa mayoría imperceptibles y casi todos a gran profundidad.
De acuerdo con la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres de Colombia (UNGRD), un sismo es la liberación súbita de grandes cantidades de energía, que se representa en ondas que se desplazan por el interior de la tierra y que al llegar a la superficie son percibidas por las personas y estructuras, ocasionando diferentes niveles de daños y pérdidas.
La entidad explica que Colombia se encuentra ubicada en una zona geológica compleja, se encuentra influenciado por la unión y actividad de las placas tectónicas Suramericana, Nazca y Caribe, y al interior por múltiples falla geológicas como la de Romeral y la falla del Piedemonte Llanero.