Con la expedición del decreto 0207 del 2022, la Alcaldía de Bucaramanga prohibió la fabricación, uso y venta de la pólvora en la ciudad durante estas festividades decembrinas. Sin embargo, hay quienes hacen caso omiso a la norma y continúan usando juegos pirotécnicos, e incluso, a la fecha, tres personas han resultado quemadas.

Pero, no solo las personas terminan afectadas por el mal uso de la pólvora. Las mascotas también sufren graves consecuencias por la pirotecnia, teniendo en cuenta que sus oídos son más sensibles que el de los seres humanos, lo que les genera múltiples afectaciones, que en algunos casos son irreversibles.

Ante esta situación y la desobediencia de algunas personas, ambientalistas, defensores de animales y autoridades adelantan la campaña ‘Ponte en mis oídos’, con la cual buscan hacer un llamado a la ciudadanía para que eviten que los animales sean expuestos a miedos y angustias por los juegos pirotécnicos.

“La campaña busca evitar que los animales silvestres y domésticos sean víctimas del estrés y sufrimiento que les genera el alto impacto de la pólvora y en especial los juegos pirotécnicos, sobre todo en fechas como Navidad y Año Nuevo. Las aves suelen desubicarse y muchas de ellas mueran estrelladas contra objetos fijos. Los animales domésticos, como perros y gatos, pueden perderse de sus guardianes o sus casas al intentar huir de las detonaciones”, explicó el Grupo Especial para la Lucha Contra el Maltrato Animal (Gelma).

Cuando estos animales escuchan sonidos fuertes como truenos, golpes o detonaciones de pólvora se asustan, pues su capacidad auditiva se ve alterada. “Los perros y gatos pueden soportar una intensidad sonora de 85 decibeles y el estallido de la pólvora puede llegar hasta 200 decibeles”, indica Pettys, sitio web especializado en mascotas.

Después de una explosión intensa, los animales pueden quedar con síntomas de estrés postraumático y esto lesiona su bienestar físico y emocional.

Algunos de los síntomas que presentan las mascotas son salivación excesiva, ansiedad, pérdida de apetito, orinar o defecar. Para evitar que los animales estén en peligro y no se se vean afectados por la pólvora, a continuación, el Instituto Distrital de Protección y Bienestar Animal, brinda algunas recomendaciones para tener en cuenta ante situaciones de uso de pólvora:

  • Sitio seguro: se debe crear un espacio en el que las mascotas se sientan seguras, como una cama, mueble, caja con juguetes y snacks. Al momento de que el animal tenga miedo, este espacio lo hará sentir cómodo y tranquilo.
  • Música: para disminuir los efectos agresivos de las detonaciones por la pólvora se recomienda poner sonidos o música relajante para ayudar a calmarlos, como la música clásica o melodías suaves. También se deben cerrar las puertas y ventanas para disminuir la frecuencia del sonido de las explosiones.
  • Aceites esenciales: deben ser 100 % naturales. Se pueden preparar en casa, con aceite de lavanda y mezclarlo con aceite de coco. Para aplicarlo, se recomienda utilizar un difusor o splash y realizar pasajes suaves en la mascota.
  • Snacks: existen algunos nutacéuticos que se encuentran en algunos alimentos para relajar y calmar, especialmente a los perros. “Muchos contienen precursores de la serotonina, neurotransmisor importante para la regulación de las emociones y muy útil en este tipo de casos, debe suministrarse bajo previa prescripción de un médico veterinario etólogo”, enfatiza la entidad.