Un juez envió a prisión al director del establecimiento penitenciario y carcelario del municipio de Vélez (Santander), Miguel de los Santos Lemos Lemos, como presunto responsable del delito de concusión.
La decisión quedó en firme luego de llevarse a cabo la audiencia de legalización de captura e imputación de cargos, la cual se extendió por dos días debido a los constantes aplazamientos. De acuerdo con fuentes cercanas al caso, Lemos Lemos será enviado a la cárcel La Picota en Bogotá, allí deberá permanecer recluido mientras avanza la investigación en su contra.
El hoy procesado fue capturado el pasado martes de 21 de marzo, cuando recibía dinero producto de una extorsión en el municipio de Vélez, en medio de un plan antiextorsión realizado por el Gaula de Policía y la Fiscalía.
“Este ciudadano, quien se desempeñaba como el director del establecimiento carcelario de Vélez, venía realizando exigencias a la víctima a cambio de no quitar el beneficio de prisión domiciliaria y llevarlo a pagar su condena al interior del establecimiento de reclusión”, explicó la Fiscalía.
Al momento de la captura, Miguel de los Santos Lemos Lemos fue sorprendido en flagrancia recibiendo un millón de pesos, al parecer, producto de las exigencias que le hacía a la víctima, quien ya le había pagado cerca de siete millones de pesos.
De acuerdo con las autoridades, la víctima es un hombre quien se encuentra condenado por el delito de Narcotráfico; sin embargo, goza del beneficio de casa por cárcel.
Miguel de los Santos Lemos Lemos, de 60 años, no aceptó los cargos que la Fiscalía le imputó. Así mismo, se conoció que esta persona se desempeñaba como director de la cárcel de Vélez desde el 2 de diciembre del 2011, por lo cual se investiga si más personas privadas de la libertad fueron extorsionadas durante este tiempo.
Por su parte, Hernando Mantilla, defensor de los derechos carcelarios en Santander, aseguró que esta situación es producto de la corrupción que se presenta en todas las cárceles del país, debido a la falta de controles por parte de las autoridades competentes.
“Este señor llevaba 12 años dirigiendo esa cárcel, eso es absurdo. Pero Santander no es el único lugar donde se presenta esto, en varias cárceles del país los directores pasan años atornillados en el cargo, eso es negativo y se presta para situaciones como esta de corrupción, la cual está ligada con el manejo de las cárceles. Es como si no hubiese nada más capacitado para dirigir las cárceles”, dijo Mantilla.
Agregó: “Esto afecta todo el sistema penitenciario y carcelario, es necesario que entre la reforma de las cárceles también se establezcan directrices para que personas como este señor no permanezcan por tanto tiempo en los cargos”.
Estrategia del Inpec contra la corrupción
Seguridad y resocialización es el binomio que el Instituto Nacional Penitenciario (Inpec) pone en marcha para combatir la corrupción en los centros carcelarios del país.
Justamente en ese propósito, el Inpec impulsó varios proyectos de resocialización con internos de la cárcel La Picota, escenario de los recientes escándalos por hechos de corrupción y beneficios para privados de la libertad del pabellón de extraditables. Se trata de iniciativas que incluyen deporte, cultura y arte.
Las iniciativas de resocialización no solo fortalecen los proyectos personales y profesionales de las personas privadas de la libertad, sino que crea compromiso con las condiciones propias de su reclusión en las cárceles. Además, ayuda a eliminar los escenarios que otros internos aprovechan para convertir los pabellones de cárceles como La Picota, en balnearios.