Las mujeres continúan siendo las principales víctimas de casos de violencia intrafamiliar y sexual en el departamento de Santander. El caso más reciente se registró al interior de un restaurante de la Central de Abastos de Bucaramanga, el cual quedó registrado en video.
Al mencionado lugar llegó un hombre, quien fue identificado por las autoridades como Jonathan Jair Henao Sepúlveda, en busca de su pareja; la mujer era quien atendía el establecimiento. En las imágenes, que se viralizaron en redes sociales, se observa a la pareja conversar detrás del mostrador.
En cuestión de segundos la conversación se tornó tensa, en un aparente ataque, Henao Sepúlveda comenzó a agredir verbalmente a su pareja; luego la apercolló e intentó taparle la boca para que no pidiera auxilio. Aunque la mujer intentó defenderse, terminó siendo herida.
Jonathan Jair sacó un cuchillo y en repetidas oportunidades hizo lances para apuñalar a su pareja, la hirió en la cabeza. Un cliente del establecimiento, quien presenció el ataque, intervino y logró evitar que Henao Sepúlveda siguiera agrediendo a su pareja.
Al restaurante también acudieron los guardias de seguridad de la Central de Abastos, quienes detuvieron al agresor cuando intentaba escapar. Minutos después, la Policía arribó y capturó al hombre e incautó el cuchillo que fue empleado en el ataque; entre tanto, la víctima fue auxiliada y llevada de urgencia a la Clínica de Girón; por fortuna logró sobrevivir.
Este caso de violencia intrafamiliar es solo uno de los 1.438 que se han denunciado en lo corrido del año en el departamento de Santander. De acuerdo con la Secretaría de la Mujer de Santander, las denuncias de casos similares han aumentado en un 6 % y del total de los casos en 1.164 la principal víctima es la mujer.
“Este año hemos registrado tres feminicidios, la misma cifra que se tenía a la fecha en el año 2022. Un nuevo caso de violencia contra la mujer se presentó un Bucaramanga, un ataque con objeto cortopunzante a una señora por parte de su expareja sentimental, hecho que fue tipificado como tentativa de feminicidio, procediéndose también a decretar medida de la libertad contra el agresor en centro carcelario. Es preocupante la situación de violencia que se desarrolla en el departamento”, señaló la entidad.
Según un reporte del Inpec entregado a SEMANA, cerca de la mitad de los detenidos (sindicados y condenados) por violencia intrafamiliar, que generalmente es un paso previo al feminicidio, se encuentra en detención domiciliaria o, peor aún, con brazalete electrónico, un dispositivo con el que se le permite al detenido moverse por un rango determinado bajo vigilancia de las autoridades.
“En articulación con la Policía Nacional atendemos situaciones que representan un riesgo latente contra la vida e integridad de las mujeres. Queremos que en Santander no se repitan estos hechos, que se reconozcan estos hechos, que se reconozcan las conductas violentas como detonantes de terribles consecuencias y se denuncie a tiempo, por lo que los invitamos a nuestra Casa de Mujeres Empoderadas en la calle 51 #36-18 en el barrio Cabecera de Bucaramanga”.
En el departamento de Santander, los casos de violencia intrafamiliar se pueden denunciar a través de la línea 6076910980, en la cual las víctimas podrán encontrar orientación psicológica en crisis y acompañamiento para interponer denuncias de este tipo.
Está claro que, detrás de cada violencia, incluso la que no da señas de lesión, hay una práctica de dominación que se hace más fuerte si se cohabita con el agresor. A las mujeres se les pide que denuncien, pero para muchas de ellas, denunciar, ante la poca reacción de las autoridades, es una sentencia de muerte.