En el departamento, de un total de 87 municipios, 55 no presentaron afectación por minas antipersonal, lo que significó que solo era necesaria la intervención de desminado humanitario en 32 de ellos.
Tras seis años de intensas labores en los municipios de Suratá, Matanza, El Playón y Rionegro, estos fueron finalmente declarados libres de sospecha de artefactos explosivos.
A estos se suman otras localidades como Bucaramanga, Barrancabermeja, Cimitarra, Curití, El Carmen de Chucurí, Galán, Guadalupe, La Belleza, Lebrija, Macaravita, Piedecuesta, Sabana de Torres, San Miguel, San Vicente de Chucurí, Socorro, Suaita, Vélez, Zapatoca, California, Puerto Wilches, Sucre, Landázuri, Girón, Hato, Chima, Simacota, Charta y El Peñón.
En total, fueron destruidos 316 artefactos explosivos mediante técnicas de desminado manual y canino, llevadas a cabo por los soldados del Batallón de Ingenieros de Desminado Humanitario N.° 3. Estas acciones contribuyeron a garantizar la movilidad y la seguridad de más de 500.000 habitantes en la región.
Este territorio, que forma parte de la provincia de Soto Norte y se encuentra a tan solo 30 kilómetros de la capital santandereana, destaca por sus amplios cultivos de maíz y café, así como por su importante producción ganadera, lo que contribuye significativamente a la economía de la región.
Mónica González, alcaldesa de Matanza, expresa la gratitud del desminado humanitario y puntualiza: “Matanza es un territorio de productores, donde no se da lo que no sembramos; entonces, con este ya podemos decir con tranquilidad que vamos a trabajar y nuestras fincas van a incrementar su valor”.
A su vez, Ruth Villamizar, habitante de la vereda Maveda, comentó, “gracias a la labor del desminado humanitario puedo exportar mi pitaya a países como Canadá, Dubái y otras ciudades de Colombia”.
“Somos una zona afectada por el conflicto armado. Somos un municipio con una connotación de Zomac, pero esta noticia de entregarlo libre de minas nos trae la tranquilidad para los propios y visitantes”, detalló Exson Pabón, alcalde de Suratá.
Javier Bermúdez, agricultor de Suratá que cultiva tomate y lo comercializa en el área metropolitana de Bucaramanga, manifestó: “Cuando hubo la operación Berlín quedaron varias zonas minadas, pero después de la labor que ha hecho el personal del desminado ya uno está más tranquilo y ya puede andar con seguridad, porque ya se han limpiado varias zonas del municipio”.
Después del desminado, veredas de Suratá podrán tener internet, “gracias al proceso del desminado humanitario del Ejército Nacional tenemos la garantía y seguridad de que el programa ‘juntas de internet’ del Ministerio de las TIC pueda llegar hasta las veredas más apartadas del municipio”, dijo Maryori Mantilla, enlace de turismo municipal.
El brigadier general Giovanni Rodríguez León, comandante de la Segunda División, “hoy quiero contarle al pueblo santandereano que, gracias al esfuerzo de los desminadores, hombres y mujeres, logramos declarar libre de sospecha de minas los municipios de Suratá, Matanza, Rionegro y El Playón”.
De esta manera, se refleja el avance del desminado humanitario en Colombia. Hay que precisar que la seguridad de los desminadores fue realizada con el apoyo de las tropas de la Quinta Brigada adscrito por la Segunda División del Ejército Nacional.