Los habitantes del área metropolitana de Bucaramanga y en general del departamento de Santander, desde hace varios meses han evidenciado incrementos excesivos en las tarifas del servicio de energía. La Electrificadora de Santander (Essa) señaló que el alza no es decisión propia de la empresa.

La tarifa es el precio que se paga por una unidad de consumo del servicio de energía eléctrica, es decir, por cada kilovatio-hora (kWh). La cual, en los últimos meses, pasó de 450 pesos (kWh) a 730 pesos, aunque parezca un incremento pequeño en el momento de totalizar el valor del servicio en el mes, de acuerdo con el consumo, la cuenta sube bastante y así lo sienten las familias santandereanas que ven sus economías afectadas.

La situación fue denunciada por el concejal de Bucaramanga, Jaime Beltrán, quien aseguró que el incremento en la factura alcanza hasta los 40.000 pesos de más; sin embargo, esto varía de acuerdo con el estrato social.

“Estamos viviendo un incremento desmedido en el recibo de la luz en Bucaramanga, hasta 20 y 40 mil pesos de más se deben pagar. Y lo más curioso es que el alumbrado público ni funciona”, dijo Beltrán.

A la denuncia del funcionario, se unen varios ciudadanos, quienes catalogan el alza en los servicios públicos como “un robo”, que pese hacer reclamos, la cifra a la hora de pagar no disminuye.

“Me están cobrando doble luego de que dijeran que mi contador no servía y me pusieran ese electrónico, no valió los reclamos. Ahora, a pagar más por esta subida, más kilovatios y el dichoso contador, un robo de frente que nos hacen”, expresó un bumangués.

Pero además del incremento que significa para el bolsillo de las personas, el medio ambiente también se ha visto afectado por el calentamiento global, algo que ha hecho que surjan nuevas iniciativas para ahorrar más energía y cuidar el planeta.

Por su parte, la Essa explicó que el valor de la energía es el resultado de una ecuación matemática, que inicia con la Fórmula Tarifaria establecida por el Gobierno nacional a través de la Comisión de Regulación de Energía y Gas (CREG), que mediante la Resolución 119 del 21 de diciembre de 2007 determinó la manera de fijar el cálculo y metodología para que los comercializadores minoristas de electricidad identifiquen los costos de la prestación del servicio a usuarios regulados en el Sistema Interconectado Nacional.

Es decir que el incremento en tarifas del servicio no es impuesto directamente por la Essa, sino que corresponde a “seis componentes en la fórmula tarifaria, entre estos el Índice de Precios al Productor (IPP), el consumo y los cambios en precio de la energía en la bolsa”.

En ese sentido, la entidad precisa que el alza en las tarifas no se presenta únicamente en Santander, es una situación que se viene registrando a nivel nacional y que probablemente seguiría aumentando, teniendo en cuenta el comportamiento del IPP.

Para evitar golpes abruptos al bolsillo de los santandereanos, la Essa ha implementado un mecanismo regulado que da una opción tarifaria que permite a los comercializadores de energía que puedan trasladar menores costos a los usuarios.

Si un ciudadano tiene dudas sobre el valor de la energía o presenta un valor atípico en la factura, puede acercarse a una de las oficinas de atención de la Essa, para que los expertos analicen el caso y de ser necesario poder solicitar una revisión técnica a la vivienda.