Hay consternación en los departamentos de Santander y Meta tras el inesperado fallecimiento de una niña de 12 años en medio de un paseo familiar en el municipio de Curití. Las autoridades santandereana adelantan la respectiva investigación del hecho.
La trágica situación se presentó este fin de semana. De acuerdo con el reporte de las autoridades, la semana anterior una familia llegó al municipio de San Gil, proveniente del Meta, con el propósito de disfrutar de un período de vacaciones.
El sábado, 3 de septiembre, la familia se desplazó hasta el municipio de Curití, para realizar algunos deportes y actividades turísticas, entre estas conocer la Cueva de la Vaca. Allí inició la tragedia.
Minutos después de haber ingresado a la caverna, uno de los integrantes de la familia, una niña de 12 años, según el reporte oficial, comenzó a sufrir un ataque de pánico que la dejó sin respiración y a su vez, presentó otros síntomas como vómito y debilidad corporal.
De inmediato, los guías de la expedición auxiliaron a la niña, la sacaron del lugar y lograron estabilizarla. Luego la familia regresó al hotel donde se estaba hospedando en el municipio de San Gil. Allí, los padres de la menor, presuntamente, le siniestraron un medicamente y aunque la niña inicialmente mejoró, esto solo fue momentáneo.
Sobre la madrugada del domingo, 4 de septiembre, la niña empeoró a tal punto que se desmayó. En seguida fue llevada a la Clínica de San Gil, pero allí los médicos confirmaron que ya no tenía signos vitales, la pequeña falleció en el camino.
Tras este lamentable suceso la Policía de Santander, aseguró que se están adelantando las investigaciones correspondientes, en especial si el medicamento que recibió la niña le habría causado una reacción secundaria. Además, se investiga si la menor de edad sufría alguna patología.
Por su parte, los guías turísticos le aseguraron a las autoridades que los acudientes de la niña firmaron un acta de consentimiento donde se les informaba los riesgos y recomendaciones a tener en cuenta antes de iniciar el recorrido de esta actividad extrema.
Cabe recordar que hace 20 días, en el municipio de Barrancabermeja, también en Santander, se registró una situación similar. Un pequeño de cuatro años perdió la vida tras ahogarse en una ciénaga presuntamente por un descuido de sus padres.
La trágica situación se presentó el pasado domingo 14 de agosto, en inmediaciones del balneario El Manatí, sector de la Ciénaga San Silvestre en Barrancabermeja, donde departía la familia. Todo marchaba bien hasta que el menor de edad desapareció de la vista de sus padres.
Versiones preliminares indican que el niño “estaba en la orilla, de un momento a otro se sumergió y los papás comenzaron a buscarlo, pero lo encontraron ya sin vida”, contó un testigo del hecho.
Una vez el niño fue sacado del agua, personal de Bomberos Voluntarios lo trasladó hasta la Policlínica, donde lastimosamente se confirmó el deceso. La víctima fue identificada como Luis Ángel Guzmán, de cuatro años.
Según la comunidad barranqueña en dicho balneario se han presentado varias situaciones similares presuntamente por el descuido de los padres con los hijos, toda vez que los adultos tienden a distraerse realizando otras actividades.