Ante un reciente caso de violencia e intolerancia entre un motociclista y un agente de la Dirección de Tránsito de Bucaramanga (DTB), quienes protagonizaron una riña en plena vía pública, la Policía Nacional hará acompañamiento a estos funcionarios que por lo menos en 50 oportunidades durante este año han sido víctimas de este flagelo en la ciudad.

“Hemos hecho algunos controles con el acompañamiento de la Policía y nos ha ido bien. En este momento estamos fortaleciendo un convenio interadministrativo donde vamos a tener el apoyo de la Policía y ese respaldo que se requiere”, señaló Alfred Yoset Fajardo, director (e) de la DTB.

Esto se determinó tras de la bochornosa escena que ocurrió el pasado martes 20 de diciembre luego de un llamado de atención al ciudadano por parte del servidor público, justo en la carrera 27 con calle 34 de Bucaramanga, donde testigos del hecho registraron la pelea a través de un video que se viralizó en redes sociales.

En las imágenes se observa cómo el motociclista descendió enfurecido del vehículo y, sin pensarlo dos veces, se abalanzó sobre el agente de tránsito, quien también le respondió a los golpes para defenderse. En medio del situación, otro funcionario intentó separar a los hombres, pero durante algunos segundos fue imposible.

“Suélteme mano, suélteme”, se escucha decir al motociclista, mientras el alférez lo tenía contra el piso; segundos después, los hombres fueron separados. Luego, el conductor exigió al uniformado que le entregara las llaves de la moto y, ante la negativa, nuevamente se fueron a los golpes.

“Las llaves no las tiene él, qué tal como se baja y le pega”, dijo la mujer que grabó este caso de intolerancia.

Posteriormente, el motociclista soltó al agente y nuevamente se subió a su vehículo, para evitar que este fuese inmovilizado; al tiempo, seguía pidiendo que le entregaran las llaves para poder irse.

De acuerdo con las autoridades, esta situación se presentó porque el motociclista le molestó que detuvieran su recorrido para un registro de rutina. Así mismo, se conoció que el agente de tránsito, quien fue identificado como Gilberto Neira Pereira, fue incapacitado por los golpes que recibió.

Los bumangueses rechazaron este tipo de actos violentos, los cuales en los últimos meses se han repetido con frecuencia por motivos similares, donde terminan con personas heridas.

“En Bucaramanga se ha perdido por completo el respeto por las autoridades. Por eso reina el caos, se ha impuesto la violencia y la falta de cultura. Las personas siguen actuando como cavernícolas, estamos sumidos en una total anarquía y desobediencia en la ciudad”, dijo una ciudadana.

Cabe recordar que hace 15 días un agente de tránsito, también de la capital santandereana, resultó herido con un arma cortopunzante por parte de un motociclista en medio de un retén.

Este hecho se presentó en horas de la tarde del pasado miércoles, 7 de diciembre, en el barrio Provenza de la ciudad de Bucaramanga, donde un hombre agredió al alférez cuando este le reclamó por falta de espejos.

Según las autoridades, el motorizado de 23 años habría golpeado con su casco al funcionario identificado como Wilmar Díaz Amaya, quien hace parte de la Dirección de Tránsito de Bucaramanga (DTB) antes de herirlo con arma blanca.

La víctima, de 35 años, fue remitida a un centro asistencial para su valoración, donde a la fecha se recupera desde su casa. Mientras que el agresor, quien trabajaba como domiciliario, fue capturado por la misma comunidad del barrio y entregado a la Policía Metropolitana de Bucaramanga, donde un juez le dictó medida de aseguramiento.

“Estos hechos nos prenden las alarmas frente a la violencia e integridad de la vida, queremos invitarlos al respeto hacia el otro. El hecho presentado no solamente generan violencia, sino también un atentado contra la vida”, indicó el director (e) de la DTB, Alfred Yoset Fajardo.