El consumo desmedido de licor y la intolerancia suelen ser una peligrosa mezcla que, por lo general, termina en tragedia. Estos dos factores desencadenaron este fin de semana una feroz riña en el departamento de Santander, que dejó como saldo una persona sin vida y otra capturada.
Hacia las 10:00 p. m. del pasado sábado 15 de abril, Carlos Javier Gómez Tavera departía en vía pública del municipio de Curití con un joven de 22 años, quien minutos después se convirtió en su verdugo. Los dos hombres estaban consumiendo bebidas alcohólicas y uno de ellos portaba un arma blanca, sin que el otro supiera.
En medio del consumo de licor los hombres comenzaron a discutir, durante algunos segundos intercambiaron insultos y posteriormente pasaron a las agresiones físicas. Sin embargo, Gómez Tavera llevó la peor parte del enfrentamiento y resultó gravemente herido.
Carlos Gómez recibió en el tórax una puñalada de su acompañante, que lo dejó agonizante. Quienes presenciaron el violento hecho alertaron a las autoridades y trasladaron al herido hasta el Hospital San Roque de Curití, donde, pese al esfuerzo de los médicos, falleció por la gravedad de la herida.
Al lugar de la agresión acudieron uniformados de la Policía, quienes tras realizar labores de vecindario identificaron y detener al señalado homicida; para ese momento aún portaba el cuchillo con el cual habría atacado a Carlos Javier Gómez Tavera.
“Logramos, con la colaboración ciudadana, dar de manera oportuna con el responsable de este homicidio. Son hechos de intolerancia en los que no se acude al diálogo para resolver los conflictos. Lamentamos que hoy hay dos familias afectadas, una que sepultará a su hijo y otra que deberá ver cómo es llevado a una cárcel su ser querido”, señalaron las autoridades de Santander.
El joven de 22 años que fue capturado quedó a disposición de la Fiscalía de San Gil como presunto responsable del delito de homicidio, a la espera de ser presentado ante un juez de garantías para que se defina su situación judicial.
Los motivos de la mortal riña, por ahora, son materia de investigación de las autoridades. Entre tanto, se conoció que tanto víctima como victimario registran anotaciones judiciales por el delito de lesiones personales e incluso uno de ellos, además, por agresión a servidor público.
Carlos Javier Gómez Tavera, quien residía en el casco urbano de Curití, será despedido por sus familiares y amigos en cristiana sepultura el próximo martes 18 de abril. La muerte de este hombre ha generado rechazo entre los habitantes de este municipio santandereano, quienes hacen un llamado a la tolerancia.
“Duele ver cómo los jóvenes les ponen final a sus vidas por falta de tolerancia, de principios y valores desde sus hogares. Dios dé fortaleza a sus familiares y sabiduría para encaminar a sus hijos en el camino del bien, del respeto y de la responsabilidad”, dijo una habitante de Curití.
Nicolás Puentes fue asesinado al salir de un bar
Otro hecho de intolerancia se vivió, pero en la ciudad de Bucaramanga, capital del departamento de Santander, donde le arrebataron los sueños a un joven, quien estaba próximo a estudiar Derecho.
La víctima en este caso fue identificada como Nicolás Andrés Puentes Murillo, de 20 años, quien fue asesinado con arma blanca. SEMANA recopiló información contundente de esta acción violenta.
Este joven se encontraba departiendo con un amigo en un establecimiento, ubicado en la carrera 17 con calle 56, de Bucaramanga, desde las 9:00 de la noche del día anterior de los hechos, pero cuando ya se iba para su casa, sucedió lo inesperado.
Se presentó una situación donde una de las mujeres le quitó el casco al amigo de Nicolás, por lo que en el video se observa cuando él trata de recuperar su elemento.
Ante este panorama, Nicolás se acercó hasta la moto donde están las mujeres y trata de alejar a su amigo de la escena y fue en ese momento cuando uno de los motorizados desciende y se acercó hasta Nicolás, lo empujó, le pegó en la cabeza y posteriormente lo apuñaló.