Al acoger la solicitud de un fiscal de la Unidad de Vida, un juez penal con control de garantías de Cali dictó medida de aseguramiento consistente en detención preventiva contra Jeffry Camilo Tobar Novoa, alias Camo, de 23 años, consistente en detención preventiva en establecimiento carcelario.

Un fiscal especializado le imputó cargos como presunto autor material de los delitos de concierto para delinquir agravado en concurso heterogéneo con fabricación, tráfico y porte de armas de fuego, accesorios, partes y municiones y fabricación, tráfico y porte de estupefacientes.

“De acuerdo con la investigación de Policía Judicial, alias Camo sería el presunto cabecilla de una banda criminal autodenominada Las Delicias, que delinque en el barrio Siloé y estaría integrada por 10 hombres, quienes se dedican a los homicidios en la modalidad de sicariato por encargo, la venta y distribución de estupefacientes y el hurto violento en la capital del Valle”, aseguró la Fiscalía General de la Nación.

La Fiscalía sostuvo que la banda Las Delicias se dedica a los homicidios en la modalidad de sicariato por encargo.

Tobar Novoa fue capturado por agentes del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI), junto con agentes de vigilancia de la Policía Metropolitana de Cali, el 23 de enero de 2023, cuando se desplazaba por un sector del barrio El Cortijo, occidente de la capital del Valle, cumpliendo una orden emitida por un juez penal.

Cuando los servidores del CTI revisaron el Sistema Penal Oral Acusatorio (SPOA), confirmaron que alias Camo registra un requerimiento judicial por los delitos de concierto para delinquir agravado para darse por homicidio.

Entretanto, las autoridades aseguraron en las últimas horas haber esclarecido el asesinato de Bairon Stiven Ortiz López, encontrado muerto en un caño de aguas residuales del barrio Alfonso López, en Cali, en los primeros días de este año.

Bairon Stiven Ortiz López fue encontrado muerto en un caño de aguas residuales del barrio Alfonso López. | Foto: Cortesía Autor Anónimo

La investigación permitió establecer que el homicidio ocurrió en la madrugada del 5 de enero, en el barrio Belisario Caicedo, en medio de una disputa relacionada con el microtráfico de drogas. Al parecer, sus asesinos querían quedarse con un dinero obtenido por la comercialización de estupefacientes.

Para lograrlo, decidieron dispararle con arma de fuego y después botar su cuerpo. El cerebro de la operación sería un hombre identificado como Diego Fernando Endo, quien le entregó $ 80.000 y una pistola a Frank Esmerlyn Pérez, alias Ronco, para que llevara a cabo el crimen.

De acuerdo con la Policía Metropolitana de Cali, Endo tiene 36 años, es reciclador y habitante de calle, igual que alias Ronco.

Una vez cometido el crimen, y con la ayuda de un tercer sujeto, conocido como alias Deja Vu, también habitante de calle, llevaron el cuerpo de Bairon Stiven Ortiz López hasta un caño de aguas residuales y lo arrojaron para intentar desaparecerlo.

Pero el plan les salió mal. La Fiscalía General de la Nación precisó que “la muerte de la víctima quedó grabada en las cámaras de seguridad del sector y los videos aficionados de vecinos, que fueron subidos a las redes sociales”, lo cual permitió la rápida identificación de los participantes.

Las pesquisas condujeron a agentes de la Sijín a la captura de Diego Fernando Endo, cuando se movilizaba por el oriente de Cali, mientras que alias Ronco se entregó en la Estación de Policía del barrio El Diamante. Por su parte, alias Deja Vu, quien participó arrojando el cuerpo al caño de aguas residuales, está siendo buscado por las autoridades.

Estos dos sujetos responderán por el homicidio de Bairon Stiven Ortiz López. | Foto: Policía Metropolitana de Cali

“Según las indagaciones, los asegurados estarían presuntamente consumiendo alucinógenos, cuando ocurrió el crimen”, añadió la Fiscalía.

A los dos detenidos les imputaron, como coautores, los delitos de homicidio agravado en concurso heterogéneo con fabricación, tráfico, y porte de armas de fuego, accesorios, partes y municiones. Los cargos no fueron aceptados por los implicados, sin embargo, el juez del caso decidió enviarlos a la cárcel para que enfrenten su proceso con la justicia privados de la libertad.