Lo tulueños vivieron horas de terror este sábado, 10 de febrero, luego de que dos agentes de Tránsito sufrieran ataque sicariales (uno falleció y otro está herido), y al menos seis vehículos fueran incinerados en diferentes zonas de este municipio vallecaucano.
Lo anterior llevó a que este domingo, 11 de febrero, se llevara a cabo en Tuluá un Consejo de Seguridad liderado por la gobernadora Dilian Francisca Toro, junto al alcalde Vélez, el Ejército y la Policía Nacional, con el objetivo de articular acciones que garanticen el orden público tras los hechos violentos ocurridos ayer sábado.
Hechos violento que serían en retaliación por la captura y traslado a Bogotá de Mauricio Marín Silva, alias Nacho, quien es señalado de ser el jefe de la temida banda delincuencial La Inmaculada, también conocida como La Oficina.
Por lo tanto, el de alcalde Tuluá le pidió al Gobierno del presidente Gustavo Petro, agilizar la ayuda en materia de seguridad para este municipio y así hacerle frente a los delincuentes que tienen atemorizados a los pobladores de esta región.
“Para poder avanzar rápidamente en el proyecto de las cámaras de seguridad. Necesitamos que el Ministerio de Justicia nos apoye con los recursos necesario para el fortalecimiento de la justicia misma y de las instituciones. Necesitamos el apoyo del Ministerio de Defensa para también poder apoyar a la Policía y al Ejército en temas tan sencillos como de vehículos, equipos, combustible, alimentación. Es necesario que haya una decisión del Gobierno nacional, pero que sea efectiva, porque lo que nosotros vemos es que a veces las decisiones del Gobierno son lentas y entonces no avanzamos a la misma velocidad nosotros a nivel local, de lo que pueda avanzar el Gobierno nacional”, dijo Vélez en declaraciones a medios de comunicación.
No obstante, el alcalde de Tuluá agradeció el respaldo del Gobierno nacional a través del director de la Policía Nacional, general William René Salamanca, quien reiteró su disposición para que se retome el orden en este municipio vallecaucano.
Sobre las medidas que se tomaron este domingo en medio del Consejo de Seguridad, Vélez indicó que, se le solicitó al Inpec y al Ministerio de Justicia, que incomuniquen en las cárceles a los líderes de banda delincuencial La Inmaculada.
También se solicitó a las autoridades la captura de aquellos delincuentes que hacen parte de esta banda y que siguen libres y, que además, se fortalezca la inteligencia “para anticiparnos a hechos criminales”.
Así mismo, el alcalde anunció que esta noche de domingo, 11 de febrero, también habrá toque de queda desde las 8 p. m. y habrá restricción de motocicletas a partir de este lunes a partir de las 10 p. m.
“La Inmaculada es un banda criminal que se ensañó contra los habitantes de Tuluá afectando a todos los ciudadanos y esto tiene que cambiar, porque nuestra gente no aguanta más sus actos terroristas, que solo afectan a la comunidad. No vamos a ceder al chantaje de asesinos”, dijo el alcalde Vélez a través de su cuenta en la red social X, anteriormente Twitter.
Entre tanto, la gobernadora Dilian Francisca Toro fue enfática en manifestar en el Consejo de Seguridad “que el ataque a la ciudad se planea y ordena desde las cárceles, que es donde están los cabecillas que quieren aterrorizarla”.
“Al @MinjusticiaCo, que ha venido trabajando, le pedimos que, con base en la emergencia carcelaria, se adopten decisiones más drásticas para atajar el delito que proviene de las cárceles”, agregó la gobernadora en la red social X.