Camila Bastidas, una joven bióloga que tomó un bus en Cali para desplazarse hasta Ipiales, Nariño, denunció que un hombre intentó abusar de ella dentro del vehículo. La mujer hizo pública su historia en redes sociales, donde contó todo.

Relata que todo ocurrió en horas de la madrugada, con el bus en pleno movimiento y mientras aprovechaba el largo viaje para dormir. Al principio, debido al cansancio y al letargo en el que se encontraba, creyó que los tocamientos eran producto de su imaginación; sin embargo, estando plenamente consciente descubrió que de verdad estaban sucediendo, que el hombre que viajaba a su lado estaba intentando meter su mano en sus genitales.

“Estaba viajando en un bus de Cootranar desde Cali hacia Ipiales, y el señor que ocupaba el puesto de al lado se aprovechó de que yo estaba completamente dormida para tocarme. A eso de las 2:00 a. m. yo sentí como un hormigueo en mi entrepierna, me desperté y noté que el señor se movió. Me di cuenta [de] que me había arropado con su cobija y se me hizo extraño, porque yo tenía mi propia cobija. En ese momento, no había confirmado si fue él o si era algún reflejo mío de lo dormida que estaba, así que decidí esperar y, efectivamente, el señor volvió a poner su mano en mis piernas y, en el momento que estaba llegando a mi entrepierna, le agarré la mano y alcé la voz. Lo insulté y en medio de mi miedo, saqué el celular para grabarlo”, detalló Bastidas.

Dice que, tras descubrir al hombre, hizo bulla para alertar al resto de pasajeros sobre esta situación, pero que pese a su desespero y sus lágrimas, ningún pasajero hizo nada y que los únicos que intentaron ayudarla fueron los conductores. En un video dado a conocer por la mujer se ve al presunto abusador intentando cubrir su rostro mientras intenta explicarse: “Ya, ya, ya, qué pena con usted, discúlpeme, mande la mano para atrás”.

“En llanto, pedí que por favor me cambiaran de puesto, y un chico cambió con el señor. Yo no estaba tranquila así que fui a hablar con los conductores, quienes me dijeron que no podían parar porque acababan de asaltar otro bus, pero me dijeron que me hiciera adelante. Cuando estábamos llegando a Pasto, el conductor muy amablemente me dijo que iba a llamar a la taquilla para que desde el terminal pidieran a unos agentes de Policía y que nos esperaran al llegar. Ya en Pasto, los agentes estaban ahí, les conté la situación, mostré el video y cuando bajó el señor, empezaron a tomar sus datos”, explicó.

La mujer reveló dos videos más en los que el hombre, ya en Pasto y con los policías al lado, asegura que ella lo agredió a la altura del pecho dentro del bus y niega haber intentado tocar su entrepierna, a lo que ella le responde que solo le agarró las manos para poder grabar su cara. En el otro metraje, la joven les dice a los policías que no se arriesgará a continuar el recorrido hasta Ipiales en el mismo bus que viaja el sujeto. Luego, el tipo le pide que lo disculpe: “No me perjudique, mire que no tengo más dinero. Se lo suplico, perdóneme lo que haya pasado”.

“Da tristeza que viendo a una mujer en llanto y con miedo, ningún pasajero haya sido capaz de decir o hacer algo. Por favor, no sean indiferentes ante situaciones que implican algún tipo de agresión sexual, es horrible sentirse vulnerada y aún peor con el silencio de las personas”, reflexionó.

La joven afirmó que luego del presunto intento de abuso instauró una denuncia contra el hombre ante las autoridades competentes. “Por favor, chicas, tengan cuidado y nunca se queden calladas, ninguna agresión es mínima cuando vulneran nuestra dignidad”, concluyó.