Cuatro miembros de una comunidad indígena del municipio de Caldono, Cauca, resultaron heridos en una incursión armada de una disidencia de las Farc, pese al cese al fuego entre el Gobierno y estos grupos al margen de la ley. Uno de los heridos falleció.
El ataque fue confirmado por el Consejo Regional Indígena del Cauca (Cric). “Ataque con granadas de fragmentación por parte de las disidencias, columna Dagoberto Ramos a la Guardia indígena. Según el presente, los heridos serían del territorio Sa’th Tama Kiwe”, precisó la organización. Entre los heridos hay, al parecer, una menor de edad.
Inmediatamente, solicitaron el acompañamiento de la Guardia Indígena en el territorio tras el ataque. Así mismo, miembros de la organización rechazaron el suceso en medio del cese al fuego. “El cese al fuego no es con la población civil”, cuestionó Edwin Guetio, quien pertenece al Cric.
La senadora Aida Quilcué se sumó a las voces de rechazo y solicitó la intervención del Gobierno. “Hacemos un llamado que pare la guerra y avance la paz total”, aseguró.
Poco después de que se conociera el ataque armado, la propia congresista dio a conocer que uno de los indígenas heridos murió. “Lamentamos informar que uno de los guardias indígenas herido en Caldono, Cauca, acaba de fallecer por la gravedad de sus heridas”, puntualizó.
La consejera mayor Camen Jembuel le digo al diario Sucesos Cauca que “el traslado de los heridos ha sido difícil por el mal estado de las carreteras, pero nos vamos a dirigir con una comisión de derechos humanos”.
Esta misma semana, en Balboa, Cauca, disidencias de las Farc cometieron otro acto de intimidación. Sin Dios ni ley, a plena luz del día, caminaron por las calles de este municipio. Armados con fusiles y vestidos con prendas camufladas, recorrieron esta población, sembrando el temor entre la población.
La presencia de estos sujetos armados, quienes caminaron con el rostro descubierto, vació el casco urbano de Rosas. Los habitantes se refugiaron donde pudieron y algunos, incluso, se atrevieron a grabar atrincherados detrás de las ventanas de sus casas.
El grupo armado se hizo presente en el municipio en plena celebración del Carnaval de Negros y Blancos, por lo que muchas personas salieron corriendo despavoridas, tal y como ha sido denunciado en redes sociales.
“Los carnavales de Balboa (Cauca) tuvieron que ser suspendidos por la presencia de las disidencias Farc. Recado para el Gobierno: el Cauca existe y la delincuencia se lo está tomando ahora, incluso, en las calles de día”, dijo en Twitter la senadora Paloma Valencia.
El representante a la Cámara Andrés Forero también se sumó a las voces de preocupación y le pidió al ministro de Defensa responder a esta intimidación.
“Se repite en Balboa (Cauca) lo ocurrido hace poco en Policarpa (Nariño). Hombres armados de las disidencias de las Farc patrullan a sus anchas las calles del pueblo. ¿Qué dice @Ivan_Velasquez_? ¿Esto no es una violación del cese al fuego? ¿Hay que acostumbrarse a esas imágenes?”, cuestionó el congresista.
El partido Centro Democrático también manifestó su rechazo a esta incursión de sujetos armados que atemorizó a la población al caminar como “Pedro por su casa”. “Disidencias de las Farc. Balboa, Cauca. Esto no puede ser”, escribió la bancada.