Un nuevo hecho de violencia enluta al Valle del Cauca. En el municipio de La Victoria sucedió este 5 de octubre una masacre que deja como saldo tres muertos. El coronel Giovanni Cristancho, comandante del Departamento de Policía Valle, se refirió a los hechos acontecidos en esa zona rural.
“El departamento de Policía Valle lamenta los hechos ocurridos en la noche de este sábado. En una finca a 10 minutos del casco urbano, llegan tres hombres y sin mediar palabra generan heridas a tres personas, dos hombres y una mujer, que terminan perdiendo la vida”, aseguró.
Agregó que la Policía ya destinó a un grupo para determinar quiénes son los responsables de este atroz crimen.
Hasta el momento, se conocen pocos detalles de lo que sucedió en esa noche. Sin embargo, ha trascendido que la finca estaba a nombre de María Catalina Iglesias, quien habría sido la pareja de un antiguo cantante de música popular.
“Ante el posible hallazgo de los estupefacientes, la masacre se trataría de un ajuste de cuentas, en el que, aparentemente, las víctimas estarían vinculadas al tráfico de estupefacientes de manera independiente en esa zona del norte del Valle del Cauca”, aseguró el diario El País de Cali.
Según Indepaz, un organismo de la sociedad civil que lleva el recuento de las masacres en el país en su observatorio de derechos humanos y conflictividades, se habla de masacre cuando se presenta el “homicidio intencional y simultáneo de varias personas (tres o más personas) en estado de indefensión, por un mismo autor, y en iguales circunstancias de modo, tiempo y lugar”.
Esta sería la sexta masacre que se presenta en el departamento del Valle del Cauca, según esa medición. Al 11 de septiembre de este año, se habían contabilizado 47 masacres en 2024, con 168 víctimas.
En un reciente informe, SEMANA mostró cómo en los dos primeros años de Duque hubo 110 masacres, con 447 víctimas; en el mismo periodo de Petro se contabilizaron 167 con 554 víctimas. ¿Qué está pasando y por qué no se han podido erradicar esos hechos de violencia? A pesar de que el presidente Petro ha hablado desde el primer día de la paz total, esa idea parece cada vez más lejana. Los grupos criminales han ganado terreno.
Según Jorge Castellanos, entrevistado para ese informe e investigador de Indepaz, las masacres y asesinatos de líderes sociales se siguen presentando porque en muchas ocasiones estas personas son quienes impiden que los grupos criminales desarrollen sus actividades ilícitas en los territorios.
“Les hacen daño al narcotráfico y a esos grupos que están en disputa, que todavía no quieren la paz total. Entonces, ven a esas comunidades y a sus líderes como un obstáculo para seguir controlando territorios y por eso los asesinan”, afirmó Castellanos.
“Perdieron su horizonte político. Esa gente no tiene una perspectiva de lucha por los derechos y la libertad, una sociedad más justa. Están pensando en ellos y sus negocios y por eso cometen semejantes crímenes”, aseguró el investigador de Indepaz.
En el caso de los líderes sociales, por ejemplo, los principales grupos que están perpetrando las masacres de líderes sociales en Colombia son las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), también conocidos como Clan del Golfo, el ELN, la Segunda Marquetalia y el Estado Mayor Central con su división.