La vicrepresidenta Francia Márquez hizo una grave denuncia a través de sus redes sociales, donde aseguró que el colegio donde estudió su primaria fue destruido por un ataque terrorista registrado este fin de semana en Suárez, norte del Cauca.
“Rechazo con todas mis fuerzas el acto criminal contra la Institución Educativa Técnica Agrícola de Suárez- Sede María Inmaculada donde cursé mis estudios de primaria. Los violentos no van a silenciar al pueblo y su anhelo de cambio. ¡Seguimos trabajando por el país. Hasta que la dignidad se haga costumbre!”, señaló la vicepresidenta.
Las imágenes de la institución en ruinas son impresionantes. Los atentado se presentaron en Santander de Quilichao y Suárez, norte del Cauca, el pasado sábado. Según las versiones preliminares de este hecho, se trata de la activación de explosivos en dos camionetas que estaban ubicadas cerca a dos estaciones de policías en estos sectores del departamento de Cauca.
Los hechos se registraron sobre las 3:30 de la madrugada de este sábado 29 de julio, cuando un grupo de sujetos que portaban armas se movilizaron hasta esta zona en los vehículos que fueron ubicados cerca las estaciones de la policía, ubicada a un costado de la vía Popayán-Cali o Panamericana.
“Hermano, esos explosivos sonaron durísimo, despertaron al pueblo entero, después empezaron los combates acá mismo en la cabecera municipal”, relató un comerciante de Suárez a uno de los medios de comunicación local.
Atentado en Cali
La ola de atentados terroristas que se siguen generando en el país, alejan cada vez más a Colombia de la utopía que plantea el presidente Gustavo Petro como potencia mundial de la vida. Los secuestros y hostigamientos en contra de la Policía y el Ejército siguen a la orden del día, mientras las propias autoridades y la ciudadanía esperan a que algún día se tomen acciones concretas por parte de los ministerios de Defensa y del Interior.
Estos hechos criminales afectan también la vida de los animales, tal y como sucedió con un canino llamado Negro, que desde hace dos años había sido adoptado por los uniformados del CAI perteneciente al barrio Alfonso Bonilla Aragón de la ciudad de Cali, pero murió durante el ataque registrado en la noche de este sábado 29 de julio.
Desde la Unidad de Protección Animal se emitió un comunicado a la opinión pública en el que se lamentó lo sucedido con este perro, el cual acompañaba día y noche a los policías del CAI. También explicó que el canino falleció por la hemorragia que le provocó una esquirla que se alojó en su corazón.
Otro ejemplar canino que permanece en el CAI es Mona, que también recibe el cariño y cuidados de los uniformados, pero anoche fue alcanzada por las esquirlas tras el ataque con una granada. Después de varias horas sin conocerse su paradero, el animal fue encontrado y atendido por personal veterinario, ya que presentaba heridas en las patas traseras.