Cali aún no sale del asombro por la masacre reportada en el callejón El Hueco, del barrio Brisas de Mayo, sector Siloé en Cali, donde resultaron muertas cinco personas, identificadas como Carlos Andrés Jiménez, de 35 años, quien tenía cinco heridas por arma de fuego; Arley Sánchez, de 34 años; Víctor Alfonso Castro Cabezas, de 28 años; Esteban David Vásquez, de 23 años, y una persona que está sin identificar, un hombre de 55 años.
Por los hechos mencionados, la comunidad del sector está en alerta por posibles retaliaciones y ajuste de cuentas entre las bandas delincuenciales que tienen injerencia en la zona.
“Estamos hablando [de] que cerca de nueve individuos se desplazaron hacia este sitio y accionaron sus armas de fuego. Este es un evento que ocurre de forma desafortunada en una ciudad que viene reduciendo los homicidios, como en 30 años no lo había realizado. Las labores de reducción del homicidio son un 25 % con respecto al año anterior”, aseguró Jorge Iván Ospina, alcalde de Cali.
El mandatario también dijo que este hecho va a estar esclarecido en poco tiempo, puesto que tienen las investigaciones muy adelantadas. La principal hipótesis de esta masacre es la guerra que existe en el sector por microtráfico.
“Son guerras de bandas por controlar los espacios donde se vende droga y esto es un problema muy complicado, porque de la mano del manejo de las drogas, estas estructuras podrían querer tener control de otras actividades y no podemos permitirlo. Si algo no podemos permitir en Cali, es que estructuras criminales se anclen en el territorio, tenemos que desplazarlas desde la institución para proteger la vida de los ciudadanos”, recalcó.
De otro lado, el experto en seguridad, Héctor Herrera, indicó que para evitar alguna retaliación, las autoridades ya debieron conformar un Puesto de Mando Unificado (PMU). “Desde la época del narcotráfico esta zona es la única de Cali que, por haber iniciado como una invasión, allí llegaron algunas familias de otros lugares del país que se dedicaban al sicariato y microtráfico”, dijo.
Según Herrera, que la Comuna 20 sea una zona montañosa ha dificultado el accionar de las autoridades, ya que a algunos sectores solo se puede ingresar a pie por el mal estado de las vías. Es de recordar que en las primeras labores de inspección, el CTI tuvo que llegar a hacer el levantamiento a pie, ya que no había acceso para vehículos.
Ahora, el caso también está en manos de un fiscal especializado, quien junto a investigadores y policías criminalísticos están abordando el tema.
“Recordemos que en el país, la Fiscalía General de la Nación en materia de homicidios colectivos supera el 70 % de avance de esclarecimiento. Hay que señalar que ese mismo equipo con esa misma metodología ha hecho presencia en este territorio, para fortalecer la capacidad instalada de esta dirección seccional y por instrucción precisa del fiscal general de la Nación, con el propósito de recaudar los elementos materiales probatorios necesarios y avanzar en el esclarecimiento”, señaló la directora seccional de Fiscalías Cali, Sandra Eugenia González Mina.
Por el momento, las autoridades no han capturado a los responsables de este homicidio. Mientras tanto, mantienen una recompensa de hasta $100 millones por información que conduzca a los responsables de la masacre.
“La Alcaldía y la Policía Metropolitana de Cali ofrecen una recompensa de hasta $100 millones por información que permita dar con el paradero de los responsables de la masacre en la Comuna 20, sector Brisas de Mayo, durante la madrugada del martes 4 de octubre, donde cinco personas perdieron la vida”, indicó la administración distrital a través de un comunicado.
Asimismo, dieron a conocer los canales de atención para recibir información al respecto. “Se pueden comunicar a las líneas de denuncia de la Policía Nacional: 325 0454/398 9980/123/165. También al número 311 6253670. Igualmente, está disponible la línea WhatsApp 310 3656326″, dijo la autoridad.