En el Medio Atrato, en el municipio de Bebará, en plena selva de Chocó, nació Danis Rentería, y sus 43 hermanos.
El actual candidato a la Alcaldía de Cali por el partido Colombia Humana, le contó a SEMANA la peculiar historia de su familia que está llena de nostalgia, asombro y gran resiliencia.
De acuerdo con Rentería, actualmente tiene 186 sobrinos y 27 hermanos con vida, el resto han fallecido por diferentes circunstancias.
Los mayores y algunos de su edad, han muerto en el Ejército, mientras que otros fueron asesinados por la antigua guerrilla de las Farc y los paramilitares. Una familia que no ha sido ajena a la violencia que ha vivido el país, y como señala el candidato, más en estos sectores vulnerables y excluidos.
Dos de sus hermanas viven en Estados Unidos; otras dos viven en Medellín; dos hermanos en Quibdó; el resto están en Bebará; y Danis reside en Cali.
El camino exitoso de Danis al ser el primer bachiller, profesional, deportista, militar y político de la familia, parece que estaba escrito desde el momento en que se ganó una rifa para poder hacer el bachillerato.
En la época, por las dificultades que existían y por la gran cantidad de hermanos, no todos tenían la posibilidad de desplazarse hasta Quibdó a continuar sus estudios, por lo que el padre de Danis, el señor Fernando Isaac Rentería, quien tuvo cuatro esposas al mismo tiempo, siendo el progenitor de los 44, decidió rifar el cupo.
“Mis hermanos han sido mi inspiración porque siempre han estado ahí apoyándome desde el momento que me gané la rifa para poder estudiar el bachillerato. Allá en la escuela rural mixta de la Peña en el río Bebará casi todos éramos familia (hermanos, primos, tíos, sobrinos). Dos hermanos y yo terminamos la primaria al mismo tiempo y una tarde mi padre nos reunió, nos dijo que él no tenía plata para mandarnos a estudiar a todos hasta Quibdó, esto porque en Bebará solo se hacía hasta el cuarto de primaria, no había colegio”, contó a SEMANA.
En ese momento, Fernando metió en una bolsa tres números, Danis recuerda que aunque estaba pequeño, nunca olvidará ese momento. “Lo recuerdo como si fuera hoy. Mis dos hermanos con uno y dos años más que yo, se pararon de primeros, cada uno sacó su papelito y el último era el mío, ese fue el ganador”, recordó entre risas.
Así, con la bendición de su padre, Fernando Rentería, quien falleció el 2 de mayor del 2011; y su madre, la señora Evangelina Chalá, quien murió en julio del 2016, se fue a completar sus estudios secundarios.
“Mi papá tuvo cuatro esposas al mismo tiempo. Teníamos a mis madrastras Vicenta, María del Carmen y Celina; pero mi padre nos dejó una enseñanza de unión, todos éramos iguales para todas, yo iba donde alguna de ellas y me trataban como a un hijo, lo mismo cuando iba a la casa alguno de mis hermanos, mi mamá era con ellos como si fueran sus hijos, no como los de las contrarias”, relató.
Actualmente, según Danis, ninguno de sus hermanos trabaja con él en la política. Aseguró que la mayoría está en el campo, en Bebará, desempeñando labores para su supervivencia en la agricultura y la minería artesanal.
Aunque sus hermanos no estudiaron, contó que entre todos han hecho un gran esfuerzo para que los 186 sobrinos se puedan formar en diferentes disciplinas académicas. “Hoy podemos decir que tenemos muchísimos sobrinos y sobrinas que ya son profesionales o técnicos y que sus condiciones de vida cambiaron”, expresó.
El nacido en Bebará también fue Selección Colombia en Lucha Olímpica por diez años. Aunque primero se vinculó con el Ejército Nacional, donde prestó sus servicios por 24 años.
Al terminar sus estudios de bachillerato en Quibdó, su gran sueño era devolverse a Bebará para ser maestro en la escuela de ese municipio, sin embargo, en una batida del Ejército lo subieron a un camión para llevárselo al comando de la Policía en el año 1987.
“Nos pidieron a todos los que nos habían cogido en esa abatida y yo acababa de terminar el bachillerato, ahí me estuvieron ilustrando sobre la escuela de suboficial y me fui para allá, estuve un año hasta que llegué al grado de Cabo Segundo, seguí la carrera hasta llegar al grado de Sargento del Ejército”, dijo.
Agregó que llegó a Cali en el año 1997, momento en el que le dieron la oportunidad de estudiar Derecho en la Universidad San Buenaventura en la jornada de la noche, le brindaron medica beca, culminó esta carrera, y en el 2019 tomó la decisión de retirarse del Ejército.
“En ese momento, con dos amigos arrancamos este proyecto político para el Concejo de Cali, lo cual fue muy duro y complejo por las casas y tradiciones políticas de la ciudad, pero gracias a Dios y gracias a Cali logré ser electo concejal; ese fue mi primer paso en la política”, dijo.
Desde ese momento ha venido vinculado a procesos políticos. Luego de ser concejal, fue elegido para asumir el cargo de Director de Fomento y Desarrollo Deportivo de Coldeportes, del 2016 al 2018. En el 2019 fue candidato a la Alcaldía de Cali por el partido Colombia Justa Libres, contienda electoral en la que resultó con la cuarta votación más relevante, y que ganó Jorge Iván Ospina de la Colombia Humana, quien le ofreció ser parte de su gobierno como Secretario de Paz y Cultura Ciudadana.
La transición de partido político la hizo en compañía de un grupo de hombres y mujeres militares y policías retirados para apoyar el proyecto del cambio,
“Tuvimos nuestro candidato al Senado por el partido de la Colombia Humana que era el número 30, el sargento Alexander Chalá. Creo que de eso se trata la dinámica que está viviendo el país de esta transición en busca de la paz y la reconciliación de todos y todas, esa es la filosofía del partido de la Colombia Humana”, manifestó.
Agregó: “nosotros somos un grupo de hombres y mujeres en nuestra Corporación Veteranos por Colombia que somos progresistas, nosotros no somos de un lado ni del otro, somos personas que creemos en ese cambio, en el progreso del país y de nuestras regiones, a eso es lo que le estamos apuntando”, aseveró.
Como candidato a la Alcaldía de Cali, una de sus propuestas en materia de seguridad es aportarle a la ciudad con su experiencia como militar.
“En las estrategias que diseñé como sargento del Ejército y comandante de un pelotón de policía militar en el año 1998 y 1999, con toda esta experiencia y acompañado también de un grupo de militares y policías expertos en seguridad ciudadana, estamos diseñando la primera agenda para combatir las grandes estructuras de alta criminalidad en nuestra ciudad de Cali”, dijo.
Aseguró que no le dará tregua a la criminalidad que hoy azota a la capital vallecaucana. “Con todas las garantías que nos da la Constitución y la Ley, pensamos conformar un grupo especial con Policía, Ejército, Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía y las agencias de inteligencia que tienen nuestra ciudad, lideradas por el alcalde, que oramos y le pedimos a Dios que sea mi persona; estaré en cabeza y al mando de este grupo para liderar este proceso y devolver la seguridad y tranquilidad a todos los caleños”, mencionó.
También recalcó que tiene en cuenta una segunda agenda de inclusión en los territorios vulnerables para llegar con inversión social de generación de empleo, educación, inclusión a las madres cabezas de hogar, deporte, cultura y arte.
“Estoy seguro como conocedor del territorio, porque lo conozco como la palma de mi mano que con esto vamos a arrebatarle el caldo de cultivo a estas altas bandas de criminalidad en nuestra ciudad de Cali. Esas son las dos agendas en materia de seguridad humana que nosotros estamos adelantando y que estamos trabajando con este grupo de expertos y expertas en este proyecto”, recalcó.
Por ahora, sigue trazando este camino hacia su candidatura a la Alcaldía de Cali junto a su equipo primario, su familia conformada por su esposa María Genis Rodríguez, su hija María Paula, campeona mundial de Patinaje, hoy estudiante de Medicina; y su hijo menor, Juan David, aficionado al fútbol.
“Ellos son el motor motivador de levantarme todos los días y adelantar estos procesos de comunidad para Cali. Sin ellos creo que estas tareas que son muy complejas, no las podría adelantar”, concluyó.