En extrañas circunstancias fue asesinado un exintegrante de las Farc y firmante del acuerdo de paz en Cali, la capital del Valle del Cauca. El hombre fue identificado como Luis Antonio Piedrahita, de 32 años.
El homicidio se perpetró a las 5:30 a. m. del domingo 30 de abril, en vía pública del barrio Comuneros, en el oriente de la ciudad, y de acuerdo con la Policía Metropolitana de Cali, no tendría nada que ver con su pasado en las Farc o con su proceso de reincorporación a la vida civil.
Supuestamente, Piedrahita fue asesinado tras ser sorprendido robando. “Este ciudadano fue agredido por varios habitantes del sector, quienes indican que supuestamente estaba robando. Lo lesionan con arma traumática y arma blanca. Era reconocido por actividades delictivas en el sector relacionadas al hurto”, dijo José Daniel Gualdrón, comandante de la Policía Metropolitana de Cali.
El firmante del acuerdo de paz alcanzó a ser trasladado a un centro asistencial de la ciudad, donde falleció debido a la gravedad de las heridas causadas por los disparos y las puñaladas.
En su paso por la guerrilla, la víctima era conocida como alias Jhon o Migua. Actualmente, vivía en la invasión Brisas de Comuneros.
El Instituto de estudios para el desarrollo y la paz (Indepaz) señaló que la muerte de Piedrahita elevó a nueve la cifra de firmantes del acuerdo de paz asesinados este año y a 357 desde que se selló el documento.
El Partido Comunes (antes Farc) rechazó el homicidio y se solidarizó con la familia de Piedrahita. “La violencia contra firmantes de paz continúa cobrando vidas, a pesar de los esfuerzos que comienzan a vislumbrarse por parte de este Gobierno. La paz requiere garantías para la vida y la seguridad de quienes decidieron dejar las armas y volcarse a la construcción de una paz diferente”, señaló la colectividad.
El homicidio del exguerrillero es uno de los catorce registrados durante el fin de semana en Cali.
Todas las víctimas eran hombres que oscilaban entre los 19 y 77 años de edad. Dos personas fueron asesinadas el sábado, seis el domingo, el día que más matan en la capital del Valle del Cauca, con el 25 % de los casos, y seis el lunes festivo.
Las víctimas fueron ultimadas con armas de fuego o cortopunzantes en los barrios Llano Verde, San Judas, Santa Mónica, Comuneros, Floralia, Potrero Grande, San Vicente, Bonilla Aragón, El Vergel y Antonio Nariño, y en la vereda Alto Los Mangos y un asentamiento irregular.
Con corte al 30 de abril de este año, en la capital del Valle del Cauca se han perpetrado 342 homicidios, es decir, nueve más que en 2022.
El comandante de la Policía Metropolitana quiso restarle peso a la cantidad de homicidios del fin de semana señalando que el promedio de crímenes este año es similar al de la anualidad anterior.
No obstante, aseveró que las autoridades están trabajando en la identificación de las horas y sectores con los índices más altos de criminalidad para tomar acciones preventivas. “Las estrategias están encaminadas a una intervención integral, que no es solo de Policía judicial e inteligencia, sino también de apoyo con la secretaría de Seguridad y Justicia”, expuso.
La comuna 15, ubicada en el oriente de Cali, es la más golpeada por los asesinatos este año, pues pasó de registrar -hasta el momento- 31 homicidios a contabilizar 49.