El conductor que invadió, en contravía, uno de los carriles exclusivos del MIO, en el sur de la ciudad, y luego intentó romper una ventana de un bus articulado, salió a pedir excusas en un video difundido en redes sociales.
En el metraje, el hombre reconoció ser el conductor que protagonizó el bochornoso momento y lamentó lo sucedido. Alegó que lo hizo porque estaba tensionado. “Quiero pedirle disculpas a toda la ciudadanía, fue un momento de estrés. Perdón por lo ocurrido”, asegura el taxista.
En las mismas redes sociales donde se divulgó el video, los internautas señalaron que aunque, está bien que pida disculpas, también debe tener una sanción.
“Siempre es lo mismo, ya se volvió costumbre. Invaden el carril del MIO, se meten en contra vía, agreden a conductor y causan pánico a pasajeros, después aparecen en internet y salen a pedir disculpas. A esta gente deberían ponerle sus comparendos para que aprendan a respetar”, señaló un ciudadano.
Todo el suceso que derivó en las disculpas del taxista, quedó grabado. Las imágenes muestran que el conductor quedó atrapado al encontrarse de frente con el bus articulado. Como no podía continuar su camino por el carril exclusivo y tampoco podía salirse debido a los taches que separan este de la vía por donde transitan los vehículos particulares, se ofuscó.
El taxista, enojado, se baja de su vehículo y se dirige directamente a la ventana del lado del conductor, la cual tenía el vidrio arriba, y le lanza un duro golpe, para después volver al carro lanzando insultos. El conductor del bus del MIO no respondió a la agresión.
El taxista imprudente decide irse mientras comete una infracción más, pues para poder salir del carril exclusivo del MIO tuvo que dar reversa unos cincuenta metros, hasta encontrar un espacio donde no había taches y tomar la vía que usan el resto de conductores.
El comportamiento del taxista ha sido reprochado fuertemente. Algunos argumentan que un conductor que cometió este tipo de imprudencias no debería prestar un servicio al público.
En otros hehcos, recientemente, un pasajero tomó la decisión de lanzarle botellas a un conductor del MIO luego de enojarse porque este estaba manejando despacio. El objeto contundente le causó una herida en el rostro al funcionario. El incidente se registró en el barrio Desepaz, oriente de la ciudad.
“Este señor madrugó a prestar su servicio y recibe un botellazo en su cara por parte de un usuario que le pedía ir más rápido. Rechazamos cualquier tipo de violencia contra nuestros conductores”, dijo Óscar Ortiz, presidente de Metro Cali, la entidad encargada de la regulación del MIO.
Los otros pasajeros del bus ayudaron a detener el flujo de sangre del conductor y le proporcionaron agua para que se limpiara. La sangre cubrió parte de su rostro y manchó su camisa. Sin embargo, está fuera de peligro, de acuerdo con Ortiz.
Por su parte, el pasajero que agredió al conductor, quien es un hombre de 72 años, fue capturado por la Policía Metropolitana de Cali por el delito de lesiones personales. El presidente de Metro Cali se comprometió a entregar las pruebas del ataque. “Los buses cuentan con tres cámaras, dos internas y una frontal, gracias a ellas, existe todo el soporte para entregar a los organismos de policía y seguridad”, añadió.