Este viernes en las redes sociales se viralizaron las imágenes de la captura de un joven en inmediaciones del parque El Amor, en el barrio Llano Verde, en el suroriente de Cali (Valle del Cauca), en donde hubo presunto exceso de fuerza por parte de los uniformados de la Policía.

Al estilo del caso de George Floyd, un agente puso su rodilla en el cuello del joven afro, mientras otro lo esposaba, y uno más lo sujetaba por la espalda, según las autoridades, tras ser sorprendido consumiendo sustancias alucinógenas.

Pero, más allá de la indignación de la ciudadanía por la manera en la que fue tratado el joven, denunciaron la “celebración” de uno de los uniformados que lo sometió cuando yacía indefenso en plena vía.

“A un joven afrodescendiente lo oprimió con su rodilla en el cuello, pero además se gozaba del acto. Por esta razón pedimos al Estado que efectivamente se protejan los derechos de nuestra juventud”, dijo la mujer en el siguiente video.

La Policía Metropolitana de Santiago de Cali se pronunció sobre lo ocurrido y señaló que ya inició una investigación disciplinaria contra los agentes involucrados.

“Se aperturó de oficio las investigaciones disciplinarias y penales conducentes a esclarecer la presunta actuación irregular por parte de los funcionarios policiales, actuaciones que se desarrollaran con celeridad y contundencia, decisiones que serán informadas a la opinión pública en concordancia con lo dispuesto en el Nuevo Estatuto Disciplinario para la Policía Nacional de Colombia”, señalaron desde el Departamento de Policía.

El general Juan Carlos León, comandante de la Policía Metropolitana de Cali, señaló que efectivamente en las imágenes se observa a los agentes “realizando presuntamente conductas y gestos no enmarcados dentro de los preceptos y lineamientos institucionales en un procedimiento policial”, manifestó el comandante.

Según la institución, los uniformados de la patrulla del cuadrante se encontraban atendiendo un procedimiento policial, por un llamado y requerimiento ciudadano descrito en la Ley 1801 de 2016 “Código Nacional de Convivencia y Seguridad Ciudadana” y que una vez conocieron de los hechos actuaron con el equipo interdisciplinario de la unidad.

El comandante León aseguró que la Policía Metropolitana de Cali “es garante de los Derechos Humanos y orienta sus esfuerzos al fortalecimiento de las competencias profesionales basadas en el respeto hacia todos los ciudadanos”.

El caso ha causado indignación entre la población raizal, por lo cual la Asociación de Afrocolombianos Desplazados (Afrodes) salió en defensa del joven, asegurando que el procedimiento policial se realizó sin ningún fundamento, pues la víctima de los hechos no estaba cometiendo ningún delito; sin embargo, dicen que fue atacado en un acto de racismo.

“El joven no estaba haciendo nada, iba pasando cuando la Policía lo abordó. Fue tanto el maltrato que este muchacho recibió, que quedó en shock y por miedo no quiere salir de la casa; entonces, es una situación compleja, pero además repetitiva la forma en la que algunos agentes de Policía se dirigen a los jóvenes”, dijo Erlendy Cuero, lideresa de Llano Verde, a SEMANA.

Y agregó que “nosotros hemos sido muy claros en que si un muchacho infringe la ley debe responder por sus acciones, pero no aceptamos este tipo de maltrato. Además, la forma desafiante en posar como se observa en la fotografía, es inaceptable”.

Según información conocida por SEMANA, el joven horas más tarde de su captura quedó en libertad.