Dos sujetos, presuntos miembros del Clan del Golfo que tenían azotados con sus extorsiones a los habitantes de una zona rural de Buenaventura, Valle del Cauca, fueron capturados y enviados a la cárcel.
Se trata del colombiano Álvaro López Riascos, alias Nené, y Robinson Mosquera Caisamo, alias Caisa, quien tiene nacionalidad panameña.
Estos dos hombres, de acuerdo con las investigaciones adelantadas por las autoridades, estaban dedicados no solo a extorsionar a los habitantes del Bajo Calima, sino también a robarlos cada que podían.
La Fiscalía General de la Nación explicó que “los dos hombres fueron detenidos en el sector del Bajo Calima, jurisdicción de Buenaventura, por soldados del Gaula Militar, cuando armados con un fusil y en una motocicleta estarían intimidando a los habitantes de la zona para que pagaran una cuota de extorsión representada en teléfonos celulares, dinero y otros elementos personales”.
“Las unidades del Gaula montaron un retén de control y verificación y cuando los imputados llegaron hasta donde se encontraban los uniformados, decidieron eludir los controles y emprendieron la fuga”, añadió el ente investigador.
El intento de escape, sin embargo, resultó fallido. Los agentes del Gaula terminaron dándoles captura y en ese misma operación les incautaron un fusil, dos teléfonos celulares, dinero en efectivo y la motocicleta en la que pretendían huir.
Alias Nene y alias Caisa fueron acusados del delito fabricación, tráfico y porte de armas de fuego, accesorios, partes y municiones agravada, pero no aceptaron su responsabilidad, lo cual no fue obstáculo para que el juez del caso decidiera enviarlos a la cárcel.
Cabe recordar que entre finales del 2022 y principios de este año se denunció que en el Bajo Calima se vive una cruenta guerra entre una estructura del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y el Clan del Golfo).
El Bajo Calima es un corredor estratégico que conecta por el Pacífico al Valle del Cauca con Chocó y después con Panamá. Tradicionalmente, el ELN ha explotado en esa zona el uso de cultivos ilícitos, la fabricación de sustancias alucinógenas, así como el control de la minería ilegal, pero en los últimos meses el Clan del Golfo, herederos de los paramilitares, intenta llegar a este territorio para desplazar a esa célula guerrillera. En conclusión, la guerra en zona rural de Buenaventura es por el manejo y disposición de las rutas del narcotráfico.
ELN habría secuestrado
Mediante engaños, presuntos integrantes del Ejército de Liberación Nacional (ELN) secuestraron a dos hombres en el Valle del Cauca para pedir una jugosa suma de dinero a cambio de su liberación.
Las víctimas, quienes trabajan en una empresa dedicada a la recolección de chatarra, en Buenaventura, fueron contactadas para prestar sus servicios en Dagua.
Los hombres viajaron hasta este municipio para cumplir con su trabajo, pero en cuanto hicieron contacto con quienes pidieron el servicio, se dieron cuenta de que todo se trató de un engaño.
Inmediatamente, se identificaron como miembros del ELN para hacerles saber que estaban secuestrados y que si intentaban escapar los asesinaban.
Asimismo, se comunicaron con las familias de las víctimas para extorsionarlos. En las llamadas exigieron el pago de 30 millones de pesos a cambio de liberarlos.
Sin embargo, las familias no accedieron a las pretensiones de los secuestradores y pusieron los raptos en conocimiento de las autoridades, en Buenaventura.
Las pesquisas adelantadas por la Armada Nacional dieron resultado rápidamente. “Luego de un riguroso seguimiento, las víctimas fueron encontradas sanas y salvas en una zona rural del municipio de Dagua, y posteriormente fueron trasladados a las instalaciones del Gaula de Buenaventura para el reencuentro con sus familiares, evitando así el pago de la extorsión”, dijo la institución marítima.
En el rescate de los trabajadores no hubo capturas. Entre tanto, la Armada instó a las víctimas de secuestro a denunciar este delito a través de la línea 147, la cual está disponible las 24 horas del día.