Diana Rojas, una de las concejalas más críticas de la Alcaldía de Jorge Iván Ospina, sorprendió este miércoles -25 de mayo- al renunciar a su lugar en el Concejo de Cali y al Partido Liberal.

Las diferencias y roces con algunos miembros del Partido Liberal por sus posturas frente a la administración de Ospina, la llevaron a dar un paso al costado.

Asegura que su partido se volvió servil a los intereses del alcalde y que sus posiciones políticas van por otra vía. Tras su renuncia, dice que liderará la construcción de un movimiento ciudadano.

Rojas, cuya salida del Concejo de Cali se hará efectiva el 28 de junio, no descarta aspirar a la Alcaldía de Cali en las elecciones de 2023.

SEMANA habló con ella para conocer, de fondo, las motivaciones de su determinación y sus aspiraciones políticas.

¿Por qué afirma que el Concejo de Cali y el Partido Liberal son serviles a la administración de Ospina?

Renuncio para quedar en libertad de tomar decisiones y continuar con mi vida política. Renuncio también a un partido que viene siendo un comité de aplausos y ha estado arrodillado a Jorge Iván Ospina. Renuncio porque el debate que se tiene que hacer desde el control político debe estar por encima de los intereses que tienen cada uno de los concejales, en especial de los del Partido Liberal. Algo muy fuerte sucedió hace 15 días, cuando pedí al Concejo una solicitar una auditoría especial a la Contraloría General para revisar el tema de la contratación de Caligen y el presidente del Concejo, Fabio Arroyave, una de las representaciones más fuertes del Partido Liberal en Cali, pidió al Concejo que no vote, y yo no estoy de acuerdo con que los procesos de transparencia en esta ciudad se tengan que parar porque un concejal le pide a los demás que no venga la Contraloría. Después del debate de hoy, en el que Fabio Arroyave cuestionó cada una de mis posturas por las que renuncié, siento que tomé la mejor decisión. No me queda duda de que iba a haber retaliaciones de quienes lideran el partido por la postura política que asumí. Quiero tener la libertad de poder estar en las próximas elecciones, por eso renuncié al Concejo y, por ende, al Partido Liberal.

Usted habla de construir un movimiento ciudadano, ¿se va a lanzar a la Alcaldía de Cali?

Muchos más ciudadanos deberían meterse en política y muchas más personas deberían llegar al Concejo, tendríamos que ser capaces de no perder la esperanza por la ciudad. Siendo que este alcalde nos va a entregar una ciudad fragmentada, una ciudad que parece que no tiene futuro, y yo, por el contrario, veo una ciudad llena de oportunidades. Tenemos que ser capaces como ciudadanos de organizarnos y poder tener una buena representación política. Me salgo, además, para liderar la construcción de una lista ciudadana, que podamos llegar al Concejo y ser una opción a la Alcaldía en 2023.

¿Se ve como la primera mujer alcaldesa de Cali?

Es un proceso, paso a paso. La de hoy (su renuncia al Concejo) fue una decisión importante para poder decidir que quiero estar en política. Nunca pensé tener que irme del Concejo, disfruté mi labor, es un espacio muy importante, con personas valiosas. Debemos construir por encima de los egos. Haremos la tarea de armar una lista independiente al Concejo. Sé que no es fácil, pero lo podemos lograr. Tenemos que rescatar a la ciudad, no nos puede parecer normal que estemos mal gobernados. Creo que hay muchas personas que piensan que tenemos que recuperar la Alcaldía y el Concejo, después tomaremos la decisión (...) posteriormente revisaremos cómo vamos, para dónde vamos.

¿La mueve la idea de llegar a la Alcaldía de Cali?

Siento que hoy empezamos a hacer el camino, pero el cargo no puede ser lo que nos aliente a quienes queramos seguir en lo público. Tenemos que sumar, ser capaces de juntar personas que quieran unir a la ciudad. No sé quién sea la persona y cómo será ese proceso, pero sí creo que somos capaces de renovar el Concejo. Me voy con la seguridad de que este es un espacio supremamente importante, por el Concejo pasan todas las decisiones trascendentales de la ciudad. El tema de la Alcaldía lo revisaremos en el camino, en el camino nos daremos cuenta.

¿Sobre qué habría que poner la lupa en la administración de Ospina?

Seguiremos haciendo control ciudadano. Hay varios temas, entre ellos un proyecto de acuerdo con el que el alcalde pretende ignorar los recursos del predial en el polígono de renovación urbana de la ciudad. No hay que darle un cheque en blanco más al alcalde, suficiente con el crédito de los 650 mil millones de pesos. También hay que ponerle la lupa al cambio de objeto social de la EMRU, otro proyecto que el alcalde radicó, y al proyecto de Cali Distrito Especial, la ciudad no está lista, el proyecto no es lo suficientemente robusto para que el Concejo lo apruebe. Por último, hay que hacerle seguimiento al desembolso del crédito de los 650 mil millones de pesos, de los cuales ya se han desembolsado aproximadamente 286 mil millones de pesos. No se debería desembolsar un peso más porque no se está utilizando en inversiones de mediano y largo plazo, sino en programas y proyectos que tienen que ser ejecutados por el plan de desarrollo.

¿Qué rescata del Concejo?

En la renuncia me refiero a unos concejales del Partido Liberal, pero quiero que quede claro que el Concejo es muy importante y que quedan personas valiosas, unas más visibles que otras. Lo que debemos hacer es robustecerlo. Hay concejales que han dado un buen debate y que nos han acompañado en este proceso. No estaría bien decir que todo el Concejo es servil, porque los debates y toma de decisiones son independientes, pero se debe mirar con lupa cuál ha sido el trabajo de cada concejal.