Luego de que Gustavo Petro resultara electo presidente de Colombia, el alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina, no ha parado de ocultar su optimismo. El nuevo gobierno seduce de sobremanera al mandatario local, quien tiene altas expectativas sobre los planes que puede ejecutar con su apoyo en el año y medio que le queda en el cargo.

Y es que además de los ya mencionados proyectos que Ospina le presentará a Petro una vez se posesione el 7 de agosto, el alcalde caleño dio a conocer las expectativas que tiene sobre la gestión del líder del Pacto Histórico en el poder.

Una de los temas que más lo inquietan es la posición que Petro tendrá sobre la región Pacífico. Espera que esta sea prioridad en la agenda nacional, pues asegura que el país tiene una deuda histórica con esta zona y sus habitantes.

“El litoral Pacífico tiene 1.200 kilómetros de longitud y solo cuenta con dos puertos, uno en Tumaco que queda muy lejos y el otro en Buenaventura sobre el cual todavía hay dificultades en su carreteable y su conexión con el centro del país, cuando la principal carga de exportación está en la cuenca asiática. Por eso el Pacífico colombiano necesita una mirada distinta e integradora”, dijo Ospina.

En esa línea, hizo énfasis en que en el Pacífico, que comprende los departamentos de Valle, Nariño, Chocó y Cauca, no solo hay dificultades económicas, sino sociales. “Tenemos unas 80.000 hectáreas de hoja de coca sembradas, un proceso deforestación que está acabando con las cuencas hidrológicas a partir de la minería a gran escala y la presencia de diferentes grupos armados”, señaló.

“Todo esto necesita respuestas”, añadió. Por eso, dice, es necesario que el nuevo gobierno constituya una “Agencia para el Desarrollo Colombiano, entendiendo que esa región demanda mayor atención de toda la nación”.

“Colombia no puede seguir pensándose desde una mirada centralista y actuado en la periferia desde las formas que tiene Bogotá. Nosotros tenemos otra cadencia, otro tiempo, otra manera de leer el mundo, necesitamos que el país comprenda que las regiones necesitan descentralización, reconocimiento a nuestros aportes, visibilización de nuestras necesidades y trabajo diferencial”, concluyó.

Ospina, entre los más impopulares

La alcaldesa de Bogotá, Claudia López, y el alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina, son los dos mandatarios más impopulares del país, de acuerdo con los resultados de la más reciente encuesta de Invamer.

López tiene una desaprobación del 61 %, mientras que su aprobación llega al 35 %.

Por su lado, el alcalde de la capital del Valle del Cauca tiene una desaprobación del 61 % y una aprobación del 31 %.

Ahora, frente a la pregunta si los capitalinos consideran que las cosas en Bogotá están mejorando o empeorando, el 75 % de los encuestados señaló que las cosas están peor, mientras que solo el 17 % cree que van mejor.

En Cali, por su parte, el 67 % asegura que las cosas están empeorando y el 20 % cree que las cosas están mejor.