La situación de orden público en la Comuna 18, sur de Cali, donde recientemente se inauguró la ampliación de la Avenida Circunvalar, parece agravarse con el paso de los días, según lo manifestó el concejal Fernando Tamayo.
“Ayer (lunes) había un operativo de control a motociclistas, pero estos los evaden huyendo en contravía por esta avenida de alta circulación vehicular. Lo que se ve es un caos”, dice el cabildante por el Partido Conservador.
La zona, manifiesta Tamayo, está tomada por el consumo de alucinógenos, lo que la hace equiparable al ‘Bronx’ que tenía Bogotá. En el sitio, además de consumo, se ve acciones de microtráfico y prostitución.
“Esa ampliación, que debe ser un dinamizador de desarrollo urbano y una zona para descongestionar el sur, es un caos. Allá hacen stunt y aunque la Policía hace presencia, los controles se evaden”, acota el concejal.
Tamayo afirma que si el batallón Pichincha está tan cerca de este sector, se deberían coordinar acciones conjuntas entre Ejército y Policía para evitar el desorden y la anarquía que se vive en el lugar.“Es cierto que la Alcaldía debe hacer inversión social, llevar programas de atención para contrarrestar la drogadicción, pero eso no va en contra de los controles que se deben hacer porque de lo que no cabe duda es que, con todo y batallón, la delincuencia se tomó la Circunvalar entre 70 y 80″, recalcó.
Asesinato de mujeres, otra preocupación
Entre enero y junio de 2023 han sido asesinadas 28 mujeres en Cali. Solo la semana pasada, entre el 16 y el 18 de julio, se registraron otras dos víctimas. Además, durante los primeros seis meses del año se recibieron 410 denuncias por violencia intrafamiliar y 263 por delitos sexuales con víctimas mujeres en la capital vallecaucana, según las bases de datos de la Policía Nacional.
Esta situación mantiene las alarmas encendidas, sobre todo luego de que la Procuraduría reiterara su preocupación por el aumento de casos de violencia contra las mujeres y alertara sobre los 213 feminicidios registrados en Colombia entre enero y mayo de este año.
“Es alarmante saber que, en promedio, cada seis días asesinan a una mujer en Cali y podría tratarse de un feminicidio. Estamos muy preocupadas por la alerta de la Procuraduría y el aumento de casos de violencias basadas en género. Necesitamos avanzar en campañas de prevención y sensibilización, así como fortalecer las rutas de atención con enfoque diferencial”, dijo María Camila Hernández, coordinadora del Observatorio para la Equidad de las Mujeres (OEM).
Según la encuesta más reciente del Observatorio para la Equidad de las Mujeres, una de cada cuatro mujeres en Cali ha sido besada, tocada o manoseada sin su consentimiento. En el 63 % de las veces, el agresor fue un desconocido. Frente a esto, cabe recordar que las violencias contra las mujeres van creciendo en espiral y pueden culminar en su punto máximo: los feminicidios.
“Tenemos unas cifras estrepitosas: 28 asesinatos de mujeres en Cali, 410 denuncias por violencia intrafamiliar y 263 denuncias por delitos sexuales con víctimas mujeres en la primera mitad del año. Esto es gravísimo y necesitamos que las autoridades tomen acción, pero también que la comunidad se una bajando los índices de tolerancia. Algunas personas creen que es admisible que una mujer sea violentada, así que debemos cambiar esos imaginarios”, añadió Natalia Escobar, experta en medición del OEM.
Ante el panorama actual de cambios de gobiernos locales y departamentales, los análisis del OEM priorizan tres acciones que deben implementarse en las próximas administraciones para proteger a las mujeres: la primera es el fortalecimiento de los sistemas de atención diferencial para mujeres y personas diversas, en paralelo con el mejoramiento de sistemas de información a la comunidad.