El vehículo en el que se transportaba el papá de la vicepresidenta Francia Márquez, Sigifredo Márquez, fue atacado a disparos este domingo 16 de junio cuando se desplazaba entre los departamentos de Cauca y Valle. SEMANA conoció las pistas e hipótesis que rastrea la Policía Nacional para ubicar a los responsables del incidente.
La emergencia se presentó sobre las 3 de la tarde en el momento en que el pariente de la funcionaria se dirigía en un carro de la Unidad Nacional de Protección (UNP) junto a un menor de edad y a dos integrantes de su esquema de seguridad, cuyo objetivo era llegar vía terrestre hasta la ciudad de Cali.
En medio del trayecto, en la jurisdicción del Valle del Cauca, cuatro sujetos que iban en dos motocicletas dieron indicaciones al conductor del automotor para que frenara su recorrido. Sin embargo, él hizo caso omiso a las peticiones y los delincuentes reaccionaron violentamente con armas de fuego.
Así lo informó el comandante de la Seccional n.° 4 de la Policía Nacional, general Jorge Urquijo: “Ellos disparan en repetidas ocasiones, impactando cuatro veces la parte posterior del vehículo. Gracias a la maniobra de los funcionarios, logran evadir esta acción y piden auxilio en el corregimiento de Robles”.
Allí fueron atendidos por las autoridades, quienes alertaron a sus mandos por lo sucedido y se habilitó un helicóptero para trasladar a Sigifredo Márquez hasta Cali, donde se encuentra fuera de peligro. Desde ese momento, también se empezaron a realizar las investigaciones para esclarecer lo sucedido.
Urquijo reveló que los principales sospechosos son los integrantes de la estructura Jaime Martínez del autodenominado Estado Mayor Central de las Farc, quienes tienen control absoluto sobre el sector donde se presentaron los hechos y, con frecuencia, instalan retenes ilegales para saber quién se mueve por el territorio.
“Una de las hipótesis es la actuación de las disidencias de las Farc, el Estado Mayor Central, específicamente, la estructura Jaime Martínez. Estamos en proceso de investigación para argumentar con base en el material probatorio que estamos recopilando en la zona”, agregó el alto mando de la institución.
Hay especial atención sobre los alias de Ostin y Brainer, pues todas las pistas indicarían que ellos estarían detrás del atentado: “Se les atribuye esto porque, al parecer, habrían tenido participación en el hecho”, dijo Urquijo. SEMANA pudo establecer que Ostin es el cabecilla de milicias del sector y Brainer es su subordinado.
La institución está dispuesta a pagar hasta cien millones de pesos a cambio de datos certeros que faciliten la ubicación y judicialización de todas las personas que participaron en el ataque armado al papá de la vicepresidenta Francia Márquez, datos que podrán ser suministrados en las líneas de comunicación de la Policía Nacional.