La impresionante jornada violenta que vivió Colombia, especialmente el suroccidente del país, este lunes encendió todas las alarmas en materia de seguridad. Disidencias de las Farc se tomaron el municipio de Morales, en Cauca, detonaron una moto bomba en Jamundí, Valle del Cauca, y posteriormente atacaron con ráfagas de fusil a Dagua, en ese mismo departamento.
Sobre lo acontecido en este último municipio, se filtraron unos impresionantes videos de cómo uniformados de la Policía contestaron el ataque terrorista de los hombres de la columna Jaime Martínez.
Los videos aficionados muestran a un grupo de policías que se repliegan en la estación, lugar hacia donde estaba dirigido el ataque, y desde allí lanzan la defensiva para salvaguardar sus vidas y las de la población civil.
Las autoridades del Valle reportaron que en medio de este ataque no se presentaron personas heridas. Por su parte, la congresista María Fernanda Cabal compartió en sus redes sociales un video de la Fuerza Pública desde otro ángulo, acompañado de un fuerte mensaje contra el Gobierno nacional. “Esto pasó esta tarde en Dagua (Valle), es el desgobierno, la inseguridad rampante. Le anuncio al país que le haré debate de control político a ministro de Defensa, quien brilla por su incapacidad para atender ese ministerio”, dijo la parlamentaria.
Y es que lo ocurrido este lunes fue una escalada violenta de terror: La emergencia comenzó a 25 kilómetros de Cali: los guerrilleros descubrieron el inmueble en Jamundí donde duermen los policías que llegaron a reforzar la seguridad y les tendieron una trampa con una motocicleta cargada de explosivos.
Una vez detonó el vehículo, afectó a dos uniformados que estaban patrullando la zona y a cuatro civiles: un adulto mayor y tres menores de edad que, en ese momento, se estaban desplazando para ir al colegio.
Inmediatamente, el Ejército Nacional confirmó que las disidencias habían ingresado a la zona urbana de Morales donde cometieron varias atrocidades: atacaron con fusiles a los policías y robaron cerca de $ 50 millones del Banco Agrario.
El hostigamiento fue sin piedad. Cuatro personas que se encontraban al interior de la estación de la institución fallecieron, dos de ellos privados de la libertad y dos patrulleros, identificados como Jaime Andrés Calderón y Diego David López.