Las autoridades judiciales avanzan en las investigaciones para establecer quién es el responsable del atentado terrorista que estremeció este miércoles al municipio de Jamundí. Hay piezas clave en un teléfono que fue incautado minutos después de la explosión, cuyo contenido fue conocido por SEMANA.
La emergencia ocurrió sobre las 6:50 a. m. y de inmediato la Policía activó un plan candado para ubicar a los posibles involucrados. En medio de las pesquisas, la comunidad informó que un sujeto estaba actuando de manera sospechosa en las inmediaciones del lugar del incidente y se ordenó inspeccionarlo.
Los uniformados se llevaron una gran sorpresa: hallaron en su WhatsApp temidas conversaciones con un sujeto entre las 7:07 a. m. y las 7:21 a. m. Allí se leen una serie de indicaciones que, supuestamente, estaban encaminadas a afectar a la fuerza pública luego de la detonación del explosivo en la zona céntrica.
En un primer momento, ambos se saludaron y, aparentemente, el hombre que caminaba por las calles de Jamundí escribió: “Está movido. ¿Qué toca hacer?”. La respuesta del sujeto fue la siguiente: “No han entrado nada. Así sea poli. Lo que pasa, poli o ejer, se la totee”. El peatón le replicó: “Escuché que vienen del ejer”.
Este último insistió: “Entonces, papi, ¿qué hago?”. El que estaba al otro lado del teléfono le aseguró: “Que estén pendiente. No den mucha lora. Se viene, detone”. El caminante cuestionó: ¿Qué pasa sino pasa nada?” y el otro le alegó: “Espere y ya. Porque eso tiene que sonar así. Estaba tierno y vea como salió, melo”.
El paso para seguir fue este: “Espérelos. Que mire tombos, Ejército, lo que sea, reviente y se van para donde ya saben. No espere que le pase gente. Si no ha pasado, cómo la va a detonar. Ya van las hormigas. Espere, tenga paciencia, tómese una gaseosa”, fue el último mensaje que captaron los investigadores.
La interpretación que dan las autoridades es que, posiblemente, en ese momento se estaría planeando otro atentado terrorista en Jamundí y se analiza si tiene relación con el presentado minutos antes que dejó como saldo a seis heridos –cuatro civiles y dos uniformados–, un cuidador de motos es el más delicado.
En un principio, el hombre al que le encontraron el celular fue trasladado a las instalaciones de la Policía y ahora circula por las calles del departamento, dado que no fue capturado, aunque el material que le descubrieron sí está bajo la lupa de las autoridades. Así lo informó el general de la Policía, Jorge Antonio Urquijo:
“Nuestras unidades de Policía logran la conducción de una persona que, gracias a la información de la comunidad, deambulaba de manera sospechosa en el sector. En este momento se están realizando las actividades de verificación. Contamos con información privilegiada que va a ser puesta a disposición de las autoridades”, dijo.
Frente a la condición del hombre, esto respondió el alto mando: “Esta persona no está en condición de capturado, está conducido y estamos realizando las actividades previas de verificación de su permanencia en el sector y por qué en su equipo, al parecer, tenía información que tendría relación con estos hechos”.