La Secretaría de Movilidad de Cali informó que este 29 de agosto el oeste de la ciudad tendrá algunas afectaciones, debido a cierres viales que se van a realizar en la zona.

De acuerdo con la entidad, los cierres se harán en inmediaciones a la Portada el Mar, por lo que las autoridades les recomiendan a los conductores de la ciudad evitar transitar por este sector para no caer en congestiones.

En la Portada al Mar, el tráfico comprende la mayor complicación del Oeste, pues ahí coinciden los vehículos que salen de Cali, con los que van hacia Buenaventura y los que salen de los barrios Santa Rita y Santa Teresita.

“Hay cierres intermitentes y afectación a la movilidad porque la Fiscalía está realizando reconstrucción de hechos y escena de lo ocurrido durante el estallido social en ese sector de la ciudad, dentro de un proceso judicial que se está adelantando”, informó la Secretaría de Movilidad de Cali.

Las labores están siendo realizadas desde las 7:00 a. m., según informó la Secretaría de Movilidad, pero no se tiene una hora exacta en las que serán terminados los trabajos, por lo que se recomendó a la ciudadanía estar atenta a las redes sociales y página web de la Alcaldía para estar al tanto de cualquier novedad.

Además, indicaron que los cierren se están desarrollando de forma intermitente cada 10 minutos, por lo que el paso para quienes transitan con vehículos podría ser lento.

Así iba Cali después de cuatro meses del estallido

Cuatro meses después, las huellas del desastre aún son visibles en Cali: de sur a norte se aprecian todavía estaciones del Sistema Integrado de Transporte Masivo de Occidente, MIO, apenas en recuperación, pero todavía en ruinas. Sobre la calle Quinta, epicentro de varios bloqueos y protestas, están los croquis de lo que alguna vez fueron supermercados como Justo & Bueno, D1 y Dollarcity, así como sucursales de bancos incineradas. La capital del Valle parece recuperarse de una guerra.

La recuperación –dice la Alcaldía– avanza a pasos agigantados; sin embargo, lo que se ve en las calles es otra cosa. Estaciones del MIO como Meléndez y Buitrera, en el sur de la capital del Valle, aún están en manos de un puñado de jóvenes autodenominados de ‘primera línea’. Allí pasan las tardes en medio de lo que hasta hace cinco meses era una de las sucursales más concurridas del transporte masivo.

Se investigan algunos hechos del estallido social sobre esta vía.

En días soleados, el caparazón de la estación (está desmantelada totalmente) funciona como escampadero de charlas interminables y las calles de Solo Bus ahora son improvisados escenarios de microfútbol. Mientras eso sucede en la estación de Meléndez, miles de usuarios del MIO deben realizar al menos tres trasbordos para llegar a ese sector de Cali. La estación no funciona y los buses padrones deben dejar a los pasajeros a un costado de la vía, donde no se afecten las actividades de quienes todavía protestan.

En ese lugar se levantó uno de los bloqueos más grandes durante las manifestaciones del 28 de abril y días posteriores. En la zona, el pequeño comercio apenas empieza a estabilizarse, aunque las deudas de casi dos meses de cierre, sumado a la pandemia, obligaron al cierre de muchos negocios.

En el norte, la entrada a Cali por el sector Paso del Comercio, el panorama no es diferente: la terminal del MIO que lleva el mismo nombre del sector sigue siendo desmantelada, muy a pesar de que el alcalde Jorge Iván Ospina y el presidente de Metrocali, Óscar Javier Ortiz, realizaron un recorrido con bombos y platillos para anunciar su recuperación.

Los bloqueos en el oeste se presentan en el sector de El Ancla y La Portada al Mar.

Lo cierto es que el plan de recuperación de las 39 estaciones afectadas durante el paro va en segunda fase, según el mismo presidente de Metrocali: “El plan de intervención y recuperación del MIO tiene una inversión que asciende a $55.000 millones, aforados desde la Administración Distrital, Metro Cali y las pólizas de seguro. Esta segunda fase tiene un costo de $8.369 millones y se debe ejecutar en cuatro meses”, puntualizó el funcionario.