Metro Cali ordenó a Blanco y Negro Masivo (BYN), operadora de transporte del Masivo Integrado de Occidente (MIO), sacar de operación 50 de sus buses, al parecer porque no se completó la tarea de reacondicionarlos.

“Los vehículos deben ser sacados de la operación porque aún no se les ha realizado el overhaul, es decir, la revisión general que se realiza cada cierto tiempo”, indicó Metro Cali.

Ante esta decisión, Eduardo Bellini, gerente general de BYN indicó: “La única razón para no tener listo el overhaul de nuestra flota es porque Metro Cali nos adeuda $36.000 millones”.

Asimismo, desde el patio taller de la compañía, manifestó: “rechazamos rotundamente esta decisión de Metro Cali que va en contra de todos los intereses de la ciudad, de todos los ciudadanos y que lamentablemente afectan el servicio a la ciudadanía. Es muy lamentable que el propio Metro Cali atente contra el propio sistema de transporte MIO de la ciudad dejando sin servicio a miles de ciudadanos en Cali, y dejando sin trabajo a una cantidad de colaboradores que diariamente necesitan el sustento para llevar a sus casas”.

El operador Blanco y Negro Masivo rechazó decisión de Metrocali al sacarle de operación 50 buses. | Foto: Cortesía Autor Anónimo

Por esta situación se están reportando este lunes, 18 de septiembre, largas filas en las estaciones y paradas del MIO, tras la limitada cantidad de vehículos en funcionamiento.

Mientras que en un comunicado, las operadoras Blanco y Negro y GIT Masivo, le realizaron una propuesta a Metro Cali para no perjudicar el servicio del MIO.

Metro Cali expone como argumento de su decisión, “la obligación contractual de las compañías transportadoras de realizar los denominados overhaul que posibilitan ampliar la vida útil de la flota. Las transportadoras, aunque reconocen la obligación, señalan que no los han adelantado por falta de recursos, por eso proponen a Metro Cali un acuerdo que permita seguir operando la flota y, a medida en que el ente gestor les pague lo adeudado, van realizando paulatinamente los overhaul”, sostuvieron.

La operadoras agregaron: “creemos que por lo menos unos 30 mil usuarios se verán afectados diariamente por la salida de operación de estos vehículos, por eso se requiere de una acción positiva e inmediata que evite afectar a los ciudadanos que utilizan el transporte masivo. No podemos permitir que se bajen más usuarios de nuestro sistema, porque pasajero que se va no vuelve”, aseguran los voceros de las concesionarias de transporte del MIO.

Las operadoras Blanco y Negro y GIT Masivo, esperan llegar a un acuerdo con Metro Cali. | Foto: Cortesía Alcaldía de Cali

Las compañías transportadoras aseguran que esta propuesta es viable porque todos los vehículos cumplen con las condiciones técnicas y de seguridad tanto para los usuarios como para los mismos conductores.

“Nosotros no sacamos a circular un vehículo que no esté en condiciones óptimas de seguridad. Todos los días los revisamos antes de salir a operación y una prueba de que están en buen estado es que todos han pasado la revisión técnico mecánica en los centros de diagnóstico oficiales autorizados por el Estado. Por eso invitamos a las autoridades y al mismo Metro Cali, para que vengan con sus técnicos y lo constaten”, expresaron las concesionarias Blanco y Negro y GIT Masivo.

Además de la afectación de los usuarios, “se pone de manifiesto el temor de los cerca de 180 conductores de estos vehículos y sus familias quienes ven amenazado su sustento con la suspensión de circulación de los buses. Por esto las compañías transportadoras reiteran su llamado a un acuerdo que permita salvaguardar el empleo de estas personas, la estabilidad de sus familias y ante todo, la movilidad de los caleños”, manifestaron.

¿Qué dice Metro Cali?

El Presidente de Metro Cali, Óscar Ortiz, enfatizó en la relevancia de garantizar la seguridad de los usuarios del sistema de transporte masivo MIO, para lo cual ha venido informando a los concesionarios la situación de sus vehículos y recordando la imperiosa necesidad de realizar los overhaul que posibiliten ampliar la vida útil de su flota o realizar la reposición de los mismos.

Sin embargo, Metro Cali aseguró que ha esperado por más de 120 días una respuesta por parte de Blanco y Negro, superando el plazo contractual de 75 días establecidos para la presentación del certificado sobre la revisión integral de los vehículos que cumplieron los kilómetros contractuales, lo cual conlleva a la suspensión de su operación, según lo estipulado en el contrato y recomendado por el fabricante.

“El propósito fundamental de este procedimiento es prevenir cualquier incidente que los vehículos puedan experimentar durante su ruta, incluyendo posibles incendios o averías que puedan poner en peligro a los usuarios”, dijo Ortiz.

Óscar Ortiz, presidente de Metro Cali. | Foto: Cortesía Alcaldía de Cali

Además, instó a los concesionarios a poner en servicio todos los vehículos disponibles, haciendo hincapié en que no hacerlo genera una afectación directa a los usuarios. En el caso de Blanco y Negro, se ha observado que la empresa mantiene 100 vehículos fuera de operación, a pesar de contar con un contrato para operar 314 vehículos.

“Metro Cali reconoce la escasez de flota operativa como resultado del incumplimiento del Plan de Servicios de Operación programado, y esta situación podría empeorar con la retirada de estos vehículos. No obstante, la entidad no puede asumir la responsabilidad por la vida y la integridad de los usuarios. Dependerá de los concesionarios demostrar la realización de las revisiones integrales para permitir la continuidad de la operación de los vehículos o, en su defecto, proceder con su reemplazo”, precisó.