El asesinato de dos mujeres identificadas como Gloria Mendoza y María Elena Mendoza, quienes eran empleadas de la Universidad del Valle, ubicada en Cali; consternó a la ciudad el pasado 22 de febrero, cuando pasaban en una moto por la calle 13B con carrera 86, en el barrio El Ingenio, cerca de la sede Meléndez del campus universitario.
Las víctimas, al igual que la motocicleta en la que se transportaban, quedaron tendidas en la vía. Posteriormente, peritos del CTI de la Fiscalía General de la Nación, arribaron a la escena del crimen, donde adelantaron la respectiva inspección y levantamiento de los cuerpos.
De acuerdo con las autoridades, se desempeñaban como aseadoras en el campus universitario y tenían un fuerte vínculo familiar, pues eran tía y sobrina.
“Las mujeres hacían parte del sindicato de trabajadores de la Universidad del Valle. Adicionalmente, el año pasado, en el mes de julio, una de ellas formuló una denuncia penal por amenazas, dado que una persona habría llegado hasta su vivienda, en el barrio Siloé, para intentar ultimarla”, afirmó en ese momento el coronel William Quintero, de la Policía Metropolitana de Cali.
Entretanto, en las últimas horas, fueron presentados ante un juez de control de garantías, un hombre y una mujer por ser los presuntos responsables de este doble crimen.
Según la Fiscalía General de la Nación, al parecer, la mujer habría contratado a un hombre conocido como alias AK-47 para que asesinara a las empleadas de Univalle, en retaliación por una diferencia de dinero.
Este sujeto, desde otra moto que él mismo conducía, al parecer se encargó de dispararles. Por estos hechos, la Fiscalía les imputó los delitos de homicidio agravado y fabricación, tráfico o porte de armas de fuego o municiones agravado.
Una vez finalizada la audiencia, un juez les impuso a ambas personas medida privativa de la libertad en establecimiento carcelario.
En su momento, el secretario de Seguridad y Justicia de Cali, confirmó, en principio, que hasta 50 millones recibiría la persona que suministrara información precisa de este hecho.
“Con todas las autoridades hemos acordado ofrecer hasta 50 millones de pesos (...) Hemos dado instrucciones a la Policía para que se desplieguen en todo el territorio para identificar y capturar lo más rápido posible a los responsables de este hecho atroz que nos ha generado consternación”, aseguró el funcionario.
Sin embargo, pocas horas después anunció un cambio en el monto de la recompensa, elevándola a 100 millones de pesos.
“Desde la Alcaldía de Cali, elevamos a $100 millones la recompensa para desdoblar todas las tareas de inteligencia en torno a los hechos que involucran el asesinato de Gloria y María Elena. Toda nuestra solidaridad con sus familias y compañeros de trabajo”, precisó.
A este llamado urgente se unió la Gobernación del Valle del Cauca, que ofreció $50 millones más para identificar a los agresores de las mujeres. Por lo que la recompensa ascendió a $150 millones.
“Muy triste, pero sobre todo repudiable y grave el asesinato de Gloria Mendoza y María Elena Mendoza, funcionarias de la Universidad del Valle. Desde la Gobernación disponemos $50 millones de recompensa por información que permita la captura de los responsables de estos crímenes”, informó en ese entonces Clara Luz Roldán, mandataria de los vallecaucanos.
En esa línea, el alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina, dijo este viernes, 31 de marzo, que se pagará la recompensa prometida.
“Pagaremos la recompensa prometida a todos aquellos que nos entregaron información que posibilitó el esclarecimiento y la captura de los autores materiales e intelectuales del asesinato de las dos funcionarias de Univalle. La Fiscalía, Policía y Secretaría de Seguridad y Justicia, trabajaron con todas sus capacidades para conocer las causas que motivaron estos asesinatos. Desafortunadamente, presuntamente las motivaciones de los asesinatos responden a actividades al interior de Univalle que deben intervenirse”, precisó.