La Policía Metropolitana de Cali, en articulación con la Fiscalía General de la Nación y Rentas Departamentales, capturó en flagrancia a cinco personas que estarían produciendo y distribuyendo licor adulterado en la capital del Valle.
La fábrica clandestina fue descubierta en una vivienda del barrio Vipasa, norte de Cali, donde tenían todo tipo de maquinaria, envases y elementos con capacidad para el procesamiento artesanal de al menos 5.280 botellas que al parecer iban a ser comercializadas en las fiestas decembrinas, temporada de Fin de Año y Feria de Cali.
“Se trata de una estructura denominada ‘Los Donald’, conformada por el papá, los hijos, familiares y amigos muy cercanos; uno de los implicados registra antecedentes judiciales del año 2007 por ejercicio ilícito de actividades monopolísticas de arbitrio rentístico. Teníamos identificado que para estas festividades se dedicaban a la fabricación de licor adulterado”, confirmó el comandante de la Policía de Cali, Daniel Gualdrón, quien además señaló que este grupo generaba una renta semanal de 160 millones de pesos.
La banda fue desarticulada mediante una diligencia de registro y allanamiento cuando los implicados se disponían a envasar el licor adulterado y a etiquetarlo con estampillas de industrias reconocidas.
En el lugar fueron descubiertas 420 impresoras para aplicar códigos alfanuméricos, 400 dosificadoras para empacar el licor adulterado, 1200 botellas vacías, 648 botellas listas para su comercialización, 660 etiquetas, 380 estampillas con diferentes códigos, 150 cajas marcadas y dos millones de pesos en efectivo, producto de la actividad ilícita.
Los capturados fueron puestos a disposición de un Juez de Control de Garantías por los delitos de corrupción de alimentos, así como imitación o simulación de alimentos, productos o sustancias. “Se incautaron más de 420 impresoras para aplicar el código alfanumérico, igualmente 400 dosificadoras para empacar licor adulterado, más de 680 botellas listas para la comercialización y otras que se encontraban en pre lavado para el reempaque de este licor adulterado”, indicó Gualdrón.
Según la investigación y de acuerdo al material incautado, se pudo establecer que este sitio clandestino tenía una capacidad de producción de 1.320 botellas semanales y de 5.280 unidades adulteradas mensuales.
El comandante de la Policía de Cali indicó que la fábrica de licor adulterado fue desmantelada gracias a la información de la ciudadanía, a un trabajo de inteligencia y la decidida participación también de Rentas Departamentales.
Es importante resaltar que los alcoholes falsificados son extremadamente peligrosos ya que están elaborados con productos químicos tóxicos cuya ingestión puede ocasionar daños irreversibles a la salud e intoxicaciones masivas. Además, estos alambiques caseros no cuentan con las medidas de salubridad necesarias e indispensables para fabricar productos de consumo humano.
Según las autoridades, el licor adulterado deja una sensación de quemadura, produce irritación gástrica, náuseas, dolor de cabeza, visión borrosa, sangrado y en algunos casos la muerte. En su afán por obtener dinero, los falsificadores utilizan todo tipo de presentaciones y ofrecen precios por debajo del valor comercial.
“Le pedimos a la ciudadanía en general que si tiene conocimiento que en su barrio o cuadra existe alguna fábrica o bodega donde posiblemente estén dedicados a la fabricación de licores adulterados, nos informe a la línea única 123 para poder nosotros actuar; recuerden que ustedes pueden salvar vidas. Un licor adulterado puede dejar a la gente ciega o puede matarla”, manifestó Daniel Gualdrón.
Las autoridades también dieron una serie de recomendaciones para evitar ser víctima del consumo de licor adulterado.
- Siempre rasgue la etiqueta.
- Si llega a presentar algún síntoma, busque atención médica inmediata.
- Verifique que el producto esté limpio y sin partículas extrañas.
- Revise que la etiqueta o la tapa no tengan restos de tintas, ni rasgaduras.
- Sospeche cuando el licor sea excesivamente barato.
- Adquiera el producto en establecimientos de confianza o almacenes de cadena.