Fuertes protestas se han registrado este jueves -2 de febrero- en Pasto, Nariño, por cuenta de encapuchados que rechazan el incremento de la tarifa del transporte público.
Los encapuchados, inicialmente, tomaron por la fuerza al menos dos buses del Sistema Estratégico de Transporte Público y los vandalizaron.
Los vehículos fueron pintados con grafitis alusivos a las motivaciones de los desmanes y también fueron puestos sobre una vía aledaña a la sede Torobajo de la Universidad de Nariño para bloquearla. La entrada a dicha institución también fue cerrada por los manifestantes.
La Policía de Pasto le dijo a SEMANA que, posteriormente, hubo intervención de sus agentes y lograron despejar la vía.
No obstante, la vía no ha sido habilitada para el tránsito de vehículos debido a que la presencia de las autoridades y los manifestantes se mantiene.
Las autoridades reportaron que algunos encapuchados han lanzado artefactos explosivos, pero que no hay reporte de heridos.
Cabe recordar que la Alcaldía de Pasto, a través del decreto 0517 del 30 de diciembre de 2022, confirmó un incremento de $200 pesos en la tarifa del servicio de bus para este año, el cual entró en vigencia el 1 de enero.
Así las cosas, de acuerdo con el secretario de Tránsito y Transporte, Javier Recalde Martínez, “la tarifa quedó en $2.200 y aplica para los días ordinarios, domingos y festivos en todo el horario de funcionamiento del Sistema de Transporte Público, tanto para la zona urbana como rural del municipio”.
“Tras la pandemia, Pasto avanza en su etapa de recuperación económica, por eso, este aumento va acorde a las necesidades del municipio y, a su vez, contribuye a la operación del Sistema Estratégico de Transporte Público”, añadió en su momento el secretario.
La ciudad de Pasto ha sufrido en el último mes por cuenta del desabastecimiento de alimentos y combustible producto del cierre en la vía Panamericana tras los deslizamientos en Rosas, Cauca.
Lideresa asesina en Rosas, Cauca
En la noche de este martes, 31 de enero, Edilsan Andrade fue asesinada en el municipio de Rosas, Cauca, por hombres armados.
Con su muerte, ascendió a diez la cifra de líderes asesinados en lo corrido de este año, según cifras del Instituto de estudios para el desarrollo y la paz (Indepaz).
De acuerdo con el Comité de Integración del Macizo Colombiano (Cima), desconocidos llegaron hasta su vivienda para acabar con su vida. “En presencia de su hijo menor es secuestrada y llevada fuera del lugar, donde le disparan con arma de fuego en repetidas ocasiones”, detalló la entidad.
Andrade, quien era madre de cuatro hijos y tenía 41 años, fue una reconocida lideresa comunitaria y campesina de la vereda Lomabajo del municipio de Rosas.
Formaba parte del Cima, donde estaba vinculada al Proceso de Mujeres Maciceñas y a la Guardia Regional del Macizo, y fue candidata al Concejo de Rosas en las pasadas elecciones con el apoyo de la Alianza Social Independiente (ASI).
El Cima exigió celeridad en la investigación del crimen, justicia y garantías para los habitantes del Cauca. A estas peticiones se sumó el senador del Polo Democrático, Robert Daza: “El genocidio de nuestros liderazgos no puede continuar, exigimos que la Fiscalía General de la Nación inicie las investigaciones de la forma más oportuna para encontrar a los responsables”.
“Con profunda tristeza e indignación, lamentamos el asesinato de Edilsan Andrade, lideresa del departamento del Cauca a manos de grupos armados. Solicitamos a la Fiscalía empiece las correspondientes investigaciones para identificar a los responsables”, dijo el representante a la Cámara, Erick Velasco.