Un masivo operativo adelantado en las últimas horas, en Cali, permitió el rescate de 108 primates que estaban siendo usados por un centro de investigación para experimentos científicos. Presuntamente, los animales vivían en condiciones que no eran óptimas. Los hallazgos fueron reveladores.
Hasta el Centro de Investigación Científica Caucaseco, en el corregimiento El Hormiguero de Cali, llegaron funcionarios de la Corporación Autónoma Regional del Valle del Cauca, la Fiscalía General de la Nación, la Policía y el Ejército para llevar a cabo la recuperación de los primates, usados para pruebas de una posible vacuna contra la malaria.
Fueron 102 monos nocturnos y seis monos ardilla los que fueron trasladados hacia zona rural de Palmira, para quedar bajo custodia de un equipo médico veterinario de la CVC.
A los primates les realizaron diferentes exámenes y pruebas que arrojaron que en sus sistemas tenían “parásitos gastrointestinales, alteraciones en el hemograma y bioquímicas sanguíneas, que están asociadas al estrés y leve deshidratación”.
Además, la CVC detalló graves hallazgos como “amputaciones, fracturas antiguas y lesiones cutáneas de algunas falanges (dedos), presencia de sarro, desgaste, fracturas y ausencia de piezas en la dentadura, así como lesiones cutáneas en labios”.
“En uno de los individuos se registró la ausencia de globo ocular, con presencia de material purulento, así como en otros se encontraron lesiones y opacidad en cornea. Igualmente, se hallaron regiones alopécicas, dermatitis e hiperqueratosis en algunos primates y un mono nocturno presenta inflamación, necrosis cutánea y fractura de la segunda falange del tercer dedo del miembro torácico izquierdo, el cual tuvo que ser intervenido quirúrgicamente”, añadió.
Por lo anterior, el Grupo Especial para la Lucha contra el Maltrato Animal (Gelma) de la Fiscalía avanza en una investigación por los delitos contra la vida, la integridad física, y emocional de los animales; el medio ambiente y los recursos naturales y la administración pública.
Aunado a los descubrimientos de la CVC, la Fiscalía buscará determinar de dónde fueron extraídos los primates, cómo los transportaron hasta los laboratorios y las condiciones en que vivían y eran tratados. También verificarán si el centro de investigación contaban con los permisos y licencias necesarios para hacer experimentos con animales.
La CVC recordó que ya existía un proceso sancionatorio contra el Centro de Investigación Científica Caucaseco Limitada y la Fundación Centro de Primates, por presuntas infracciones contra el recurso fauna, pero que los animales no habían sido rescatados debido a que la entidad no contaba con un sitio adecuado para alojar tal cantidad de animales.
“Al haber finalizado la adecuación de un sitio para alojar a tan alto número de primates, se procedió a ejecutar la medida preventiva de aprehensión y retiro de los animales”, explicó.
Entre tanto, Alejandro Gaviria, fiscal coordinador del Gelma de la Fiscalía, quien calificó este operativo de rescate de fauna silvestre como uno de los más grandes realizados en el país, señaló que “las entidades deben prepararse para tratar temas ambientales y garantizar que los animales que estén bajo el cuidado de particulares tengan las mejores condiciones, porque son seres sintientes y es un tema de corresponsabilidad y solidaridad entre el individuo, la sociedad y el estado”.
Por su parte, Marco Antonio Suárez Gutiérrez, director general de la CVC, resaltó que “se realizó un plan de manejo en compañía de muchos especialistas de la región y de otros países, a quienes acudimos para que los primates tengan un plan de alimentación balanceada y se generen condiciones para que su comportamiento sea el adecuado”.
La entidad llevó biólogos, microbiólogos, veterinarios, zootecnistas e ingenieros ambientales para garantizar el cuidado de los monos rescatados.