En una larga persecución terminó un hurto dentro de un restaurante en Cali este martes 7 de junio, luego de que un hombre que se movilizaba en moto robara a clientes del establecimiento ubicado en el barrio Santa Catalina, sur de la ciudad, y emprendiera la huida.

Los pedidos de auxilio de las víctimas alertaron a las autoridades. En ese momento inició el asedio de agentes de la Policía Metropolitana que, por aproximadamente media hora, recorrieron las calles de la ciudad intentando atrapar al delincuente.

Los instantes en que este sujeto huye del restaurante quedaron registrados en un video captado por un ciudadano que estaba en la zona.

El hombre, a bordo de su moto, logró evadir a las autoridades por más de siete kilómetros, dijo la institución policial, hasta que finalmente fue interceptado por una patrulla.

Las autoridades tuvieron que trasladar al ladrón rápidamente a una estación de Policía, porque algunas personas enardecidas pretendían lincharlo.

Al hombre le incautaron la motocicleta en la que huyó de las autoridades y dos celulares, uno hurtado y otro de origen desconocido, señaló la Policía. Además, fue cobijado con medida de aseguramiento preventiva en establecimiento de reclusión por el delito de hurto calificado.

Cayó en Cali ‘Vuelta del diablo’

En las últimas horas, fueron capturados dos presuntos miembros de la banda delincuencial denominada ‘Vuelta del diablo’, una estructura criminal con injerencia en el barrio Siloé dedicada al alquiler de armas para la comisión de hurtos y homicidios en la capital del Valle. Uno de los señalados fue enviado a la cárcel, mientras que otro quedó en libertad.

En desarrollo de tres diligencias de registro y allanamiento, la Policía informó que fueron detenidos un hombre y una mujer conocidos en el mundo criminal con los alias de Parra y Marlyn. Autoridades dieron a conocer que ambos ocultaban en sus viviendas el arsenal que estaría al servicio de otras organizaciones que delinquen en Cali.

Investigadores pudieron establecer que el alquiler de las armas oscilaba entre los 200 y 700 mil pesos, según el tiempo y el tipo de arma.“Se presume que las armas eran utilizadas por grupos de delincuencia común organizada en diferentes partes de Cali para la comisión de hurtos especialmente a personas, celulares y automotores”, aseguró la Policía Metropolitana de Cali.

En la operación fueron incautadas una escopeta, una pistola, dos proveedores y 44 cartuchos de diferentes calibres, incluidos cartuchos para fusil y otros modificados en forma de cruz que al ser disparados se dividen en cuatro partes para causar mayor letalidad, llegando a estar incluso impregnados con sustancias como cianuro.

Los capturados fueron dejados a disposición de la autoridad competente por el delito de porte ilegal de armas de fuego. “A la mujer le fue dictada medida de aseguramiento intramural y el hombre quedó en libertad, pero continuará vinculado al proceso de investigación. El comando de esta unidad policial continuará intensificando los dispositivos para garantizar seguridad y las condiciones de convivencia ciudadana en esta parte del territorio colombiano”, indicó la Policía.