Un niño de nueve años, víctima de múltiples maltratos de parte de su madre y su padrastro, no podría volver a caminar ni hablar. Desde hace dos semanas se debate entre la vida y la muerte en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Universitario del Valle (HUV), en Cali.
De acuerdo con la Fiscalía General de la Nación, médicos forenses del Instituto de Medicina Legal valoraron al niño y encontraron un trauma craneoencefálico provocado por golpe con un objeto contundente, lesiones progresivas causadas con diversos elementos, cicatrices antiguas y otras en proceso de cierre.
La madre del niño y su padrastro, quienes lo tenían a su cargo, lo sometieron a otros vejámenes y torturas. Las autoridades determinaron que también tenía laceraciones en la espalda causadas por azotes con un látigo.
El menor, según la Fiscalía, tenía señas en sus brazos y manos que indicaban que era amarrado con cuerdas para, posteriormente, ser encerrado en una habitación de la casa, ubicada en la vereda Cachimbal del municipio de Vijes, Valle del Cauca.
Tales fueron las golpizas recibidas por el menor que actualmente tiene “múltiples secuelas neurológicas asociadas a las lesiones que le generaron en el sistema nervioso central”, aseguraron especialistas del HUV. Para que el niño pueda respirar y ser alimentado los médicos tuvieron que practicarle un traqueostomía y una gastrostomía.
“Estamos frente a una tentativa de homicidio agravado, cuyos presuntos autores son la madre y el padrastro de este menor, tanto por acción como por omisión. El niño estaba desnutrido, tenía indicios de desaseo y de lesiones en su cuerpo con elementos tanto contundentes como abrasivos”, dijo Sandra Eugenia González, directora de la seccional de la Fiscalía de Cali.
La madre del menor tenía su custodia desde octubre de 2021, luego de que el padre del pequeño, quien era el que lo cuidaba, falleciera a causa de la covid-19.
Esta mujer y su pareja fueron capturados el pasado 13 de junio por agentes del CTI de la Fiscalía. El ente acusador les imputó el delito de homicidio agravado en grado de tentativa. Luego, un juez emitió la orden para que la mujer fuera trasladada a la cárcel de Jamundí, mientras el hombre fue enviado a la cárcel de Villahermosa, en Cali.
El niño de nueve años permanece en cuidados intensivos en la Unidad de Pediatría del HUV y está bajo la custodia del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar.
La última brutal golpiza a la que fue sometido el niño, y por la cual capturaron a su madre y padrastro, ocurrió el 21 de febrero de este año, en Vijes. En ese momento el menor fue trasladado a un hospital de Restrepo. Sin embargo, después tuvo que ser remitido a Buga, y finalmente, debido a la gravedad de las lesiones, al HUV de Cali, donde el personal médico dio aviso a las autoridades sobre las torturas de las que era víctima el menor.