Ladrones fuertemente armados ingresaron a un restaurante y arrebataron las pertenencias de tres personas que estaban departiendo en una mesa.

El robo fue cometido en horas de la noche en el sur de la ciudad. Los ladrones se movilizaban en motocicleta para huir rápidamente.

Los ladrones en Cali usan armas de fuego y, en algunas ocasiones, traumáticas o modificadas. | Foto: Pixabay

La cámara de seguridad del local registró el paso a paso del hurto: los ladrones entran, desenfundan sus armas y apuntan violentamente a las tres víctimas, dos mujeres y un hombre, quienes eran los únicos clientes en ese momento. Rápidamente y sin guardar sus pistolas, estrujan, arrebatan celulares y objetos personales, y luego se marchan.

Desde cuando ingresan al restaurante hasta el instante en que salen solo pasan 25 segundos.

Otra cámara de seguridad, instalada en la parte externa del establecimiento, dio cuenta del escape de los ladrones. Una vez salieron del sitio, dos motocicletas que siempre estuvieron encendidas aguardaban por ellos. Los criminales se suben a los vehículos y sus cómplices emprenden la huida a toda velocidad con rumbo desconocido.

Este nuevo robo a mano armada, en el que por suerte no hubo heridos, desató una avalancha de comentarios en redes sociales acerca de la inseguridad que azota a la capital del Valle del Cauca. Para muchos ciudadanos resulta inaudito que los ciudadanos no puedan sentirse a salvo ni siquiera cuando salen a comer a un restaurante.

El robo ocurrió poco después de que la Policía Metropolitana de Cali y la Alcaldía decidieron explorar una curiosa estrategia para intentar apaciguar la ola de violencia en la ciudad.

Se trata de un plan desarme, el cual consiste en cambiar armas, bien sean de fuego, traumáticas o modificadas, por incentivos alimentarios.

Los horarios predilectos de los ladrones en Cali son entre las 5 y las 10 de la mañana y entre las 4 de la tarde y las 8 de la noche. | Foto: Libre de derechos

El secretario de Seguridad y Justicia de Cali, Jimmy Dranguet, explicó en detalle la estrategia: “A cambio de las armas se dará un bono para que la persona lo redima en los mercados de la ciudad y, en otros casos, se entregarán mercados físicos”.

“Antes del intercambio se verificará la procedencia de las armas y, de acuerdo con el tipo de artefacto y la comuna donde se entregue, se dará una compensación”, añadió el funcionario. Las comunas 6, 13, 14, 15, 18 y 20 tienen las tasas de homicidio más altas de la ciudad este año.

Jimmy Dranguet, secretario de Seguridad y Justicia de Cali | Foto: CRISTFRANKOP

Siguiendo las declaraciones de Dranguet, el plan desarme se pondrá en marcha la próxima semana.

En lo que va de 2023, en Cali, han sido asesinadas 113 personas, es decir, 14 más que en el mismo periodo del año pasado. Al menos el 82 % de estos crímenes, de acuerdo al Observatorio de Seguridad, se cometieron usando armas de fuego.

Las denuncias por hurto también han tenido un aumento considerable. A la fecha, 2.264 (435 más que en 202) se han quejado ante las autoridades.