A inicios del mes de agosto comenzaron las obras de dragado hidráulico de la playa cinco, la cual está ubicada entre las calles 13 y 11 del barrio Bocagrande. Por esta razón, el pasado 18 de agosto la Dirección General Marítima (Dimar), a través de la Capitanía de Puerto de Cartagena, dio a conocer que se instalarán boyas y boyarines para limitar el paso por la zona.

Esta restricción hace parte de las medidas de seguridad marítima exigidas para delimitar el área de dragado y la tubería de conducción de los sedimentos.

La instalación de boyas y boyarines color amarillo tiene dos funciones principales: delimitar la zona en la que se están realizando las obras de dragado y evitar el paso de lanchas, motos acuáticas o cualquier vehículo marítimo a dicha zona.

Sin embargo, algunas personas no han acatado la orden emitida para proteger las obras y la Alcaldía de Cartagena hace un llamado a embarcaciones a no transitar cerca de la zona de dragado. El alcalde William Dau Chamat reafirma las recomendaciones de seguridad emitidas por la Dimar.

“La Alcaldía apoya esta invitación hecha al gremio marítimo y a los turistas que llegan a nuestra ciudad a que respeten el área delimitada, por lo cual queda prohibido el tránsito de motos acuáticas y embarcaciones en la zona delimitada. Cuídense, no pueden pasar por ahí. Queremos evitar accidentes”, afirmó Dau Chamat.

Salomón Muñoz, ingeniero residente de la obra, indicó que algunas embarcaciones y motos acuáticas siguen transitando por los polígonos de dragado, e incluso por encima de la tubería, a pesar de las distintas socializaciones en terreno y las advertencias de la Dimar y del Distrito.

María Isabel Lugo, directora del Departamento Administrativo de Valorización Distrital, enfatizó que “lo más importante es pedirle a la comunidad y a los turistas que tengan mucho cuidado al transitar en los vehículos acuáticos para evitar accidentes o daños a la tubería”.

Zona de dragado

La draga está ubicada a 1.500 metros de distancia con una tubería instalada de igual longitud que bombea el relleno para conformación de la playa número 5, comprendida entre el centro comercial Plaza Bocagrande y el hotel Decameron.

La directora Lugo agregó que la tubería está debidamente señalizada con boyarines cada 50 metros, las dragas tienen boyas y de noche cuenta con iluminación.

Las obras de dragado son de vital importancia para la conformación de playas. A través de esta tubería se bombea un estimado de 3.500 metros cúbicos de material por hora. A la fecha la playa número 5 tiene un 5 % de avance de relleno. Por esto es de vital importancia reiterar el llamado a respetar las señalizaciones para no causar traumatismos en la obra ni accidentes que lamentar.

Acerca del Proyecto de Protección Costera

A raíz de una calamidad pública declarada en el año 2018, cuando se presentaron fuertes inundaciones en la ciudad de Cartagena, a lo cual el Gobierno se vio en la necesidad de poner en marcha este proyecto que venía siendo tratado hace varios años por la Universidad de Cartagena. Tras ser consolidado y aprobado por el distrito y la unidad nacional de Gestión del Riesgo, se dio paso a su ejecución.

El proyecto se está desarrollando desde la curva de Santo domingo hasta el espolón de Iribarren, con un total de 4,7 km aproximadamente, en el área de Bocagrande, donde se está realizando una protección marginal de 460 metros, una escollera tipo 2 de 1 km aproximadamente, la construcción de seis espolones y cinco playas que van a ser ampliadas para el disfrute de los ciudadanos de Cartagena y los turistas.

Otros Proyectos

El proyecto de ‘Restauración de los Ecosistemas Degradados del Canal del Dique’ está concebido para controlar el tránsito de sedimentos del canal hacia la bahía de Cartagena y la bahía de Barbacoas, además de mitigar el riesgo de inundaciones al estar al tanto de los niveles de agua en el canal.

El proyecto construirá dos sistemas de esclusas en Calamar y Puerto Badel, compuertas en Calamar y obras de interconexión entre las ciénagas del área de influencia del brazo artificial del río Magdalena.

El proyecto es pionero en Latinoamérica y contará con una inversión por el orden de los $3,1 billones, luego de más de 50 años de estudios, debates y conversaciones sobre su viabilidad.