El pasado miércoles 1 de marzo, mientras la ciudad atravesaba un colapso en la movilidad, el estudiante Sebastián Payares, pasaba por uno de los momentos más frustrantes e incómodos de su vida.

Payares a través de sus redes sociales, contó cómo habría sido víctima de racismo por parte del guardia de seguridad del almacén Dollarcity ubicado en el centro comercial Mall Plaza de Cartagena. SEMANA se contactó con el denunciante para conocer a fondo la situación.

“Sinceramente, no tenía ningún ánimo de hacer este hilo, pero siento que si no expongo lo ocurrido es muy probable que se repita. Hoy, aproximadamente a las 8:00 p. m., sufrí en el Dollarcity del Mall Plaza un caso de abuso por parte del personal de seguridad”, indicó en su cuenta de Twitter.

El evento tuvo lugar en Dollarcity (Imagen de referencia) // Foto Guillermo Torres Reina / Semana | Foto: GUILLERMO TORRES REINA

El joven explicó que ingresó al local una hora antes del cierre junto a un amigo para comprar algunas cosas. Sebastián describe que el lugar estaba lleno de clientes, por eso se pusieron en disposición de tomar los productos para comprar y salir rápido del sitio.

“La tienda estaba completamente llena, al igual que los pasillos. Hubo un momento, mientras estaba en uno de los pasillos con mi amigo en el que me acomodé un poco el pantalón por dentro (había ido al baño minutos antes)”, señaló.

Acto seguido, los jóvenes pagaron lo que iban a llevar e iban a salir, en ese momento el guarda de seguridad los detuvo y les pidió una requisa. En el momento los chicos no vieron ningún problema y accedieron al procedimiento.

La situación entró en mayor tensión cuando el trabajador aseguró la puerta, le solicitó a Sebastián que “me ponga en una esquina y saque lo que llevaba bajo el suéter”, lo cual les tomó por sorpresa.

El hombre que inició el procedimiento era el guarda de seguridad de Dollarcity.

Inicialmente, Payares no prestó mucha atención, pues debido a la cantidad de personas, no escuchó muy bien la solicitud, pero el vigilante fue insistente y el joven tuvo que levantar su suéter, al ver que no llevaba nada, el estudiante le preguntó “en qué se basaba para decir eso, a lo que no obtuve respuesta”.

Nuevamente, intentaron salir del sitio, sin embargo, el trabajador continuó asegurando que Sebastián tenía algún producto escondido, acto seguido llamó a una trabajadora del lugar para que lo “llevara para el cuartico ese a revisarme”.

Antes de ir a dicha habitación, el joven estiró su pantalón para mostrar que no llevaba nada allí, sin embargo, tuvo que ir al cuarto para ser revisado. “Cuando le explico a la persona que solo me estaba acomodando el pantalón, ella dice ‘yo no sé' y se va”.

“Salí de ese cuarto para tratar de salir del local otra vez, la gente que estaba adentro estaba amontonada, pues quería salir también y no entendía qué pasaba. El vigilante, aún no convencido, volvió a decirme que entrara de nuevo a ese lugar. Entendí por lo insistente que estaba que quería que me bajara los pantalones y eso hice”, señaló el afectado.

La víctima fue requisada por personal de Dollarcity (Imagen de referencia). | Foto: Semana/Jeimi Villamizar

Finalmente, el guarda de seguridad constató que no tenía nada, ningún producto, y decidió abrir la puerta, inmediatamente Sebastián y su amigo salieron del almacén al igual que el resto de personas que se encontraban allí.

“Tenía demasiada vergüenza, porque el local estaba superlleno dentro, y escuchaba como las personas murmuraban detrás de mí. Realmente tenía un gran sentimiento de frustración, en el momento estaba completamente cansado porque salí de mi casa a las 7:00 a. m., y sufrí mucho para llegar a mis clases en la universidad, vivo en una zona muy alejada del centro. Tenía mucha rabia y el corazón, a mil”, contó con mucho sentimiento.

Asimismo, el joven, que se encuentra cursando octavo semestre de derecho, está preparando acciones legales contra el almacén y el centro comercial. Por el momento, Dollarcity aún no se ha pronunciado sobre el hecho.