Momentos de pánico vivió un grupo de turistas que se encontraba a la deriva a diez millas de la costa de Playa Blanca. Marinos pertenecientes a los Guardacostas de Cartagena se encontraban realizando patrullajes marítimos cuando se percataron de la situación.
Los marineros alcanzaron a divisar a la distancia a un grupo de personas en aparente estado de emergencia e inmediatamente se dirigieron hacia ellos para rescatarlos.
Se sabe que la embarcación en la que viajaban naufragó y al conocer la situación, unidades de la Armada de Colombia fueron en auxilio de los 22 turistas en apuro, quienes se encontraban en cercanías a la isla de Barú.
Asimismo, al ser rescatados, el grupo de guardacostas les brindó primeros auxilios, y la mayoría de las personas rescatadas presentaron heridas leves. Posteriormente, fueron trasladados a puerto seguro en Cartagena, donde se les proporcionó atención médica profunda en un centro asistencial.
Por su parte, la Armada de Colombia, en articulación con la Capitanía de Puerto de Cartagena, se encuentran realizando las investigaciones pertinentes para esclarecer los detalles que permitan determinar las causas del siniestro marítimo.
Por lo pronto, la Institución Naval manifestó que en lo que va corrido de 2022, han sido rescatadas por lo menos 230 personas que sufrieron alguna emergencia en los mares y ríos de la región Caribe colombiana.
Otros operativos de la Armada
En las últimas horas, en medio de operaciones de control marítimo en San Andrés, la Armada logró la incautación de cerca de media tonelada de cocaína lista para ser enviada al exterior”. La droga tendría como destino Centroamérica y era transportada a bordo de una motonave tipo “Go Fast”, explicó la Armada.
Así mismo, indicó que “los sujetos de la motonave sospechosa al notar la presencia de las autoridades militares arrojaron el alijo al mar y emprendieron la huida. Posteriormente, hombres de la Institución Naval recuperaron los 23 bultos que habían sido lanzados por la borda y, acto seguido, fueron transportados a bordo del buque hasta la isla de San Andrés, con el fin de realizar un proceso de verificación exhaustiva”.
Luego de la acción en el mar, en tierra, dijo la Armada, “marinos de la Institución identificaron 554 paquetes rectangulares que se encontraban dentro de 23 bultos y, en coordinación con efectivos de Policía Judicial, efectuaron la Prueba de Identificación Preliminar Homologada - Piph, arrojando positivo para clorhidrato de cocaína con un peso de 554 kilogramos”.
Respecto al valor del cargamento en el mercado internacional, señaló la Armada que, “el estupefaciente que estaría avaluado en más de 18 millones dólares en el mercado ilegal internacional, fue puesto a disposición de la Policía Judicial para su custodia y destrucción de acuerdo a lo establecido por la legislación colombiana”.
Rescatan a dos niños de las aguas del río Atrato en Antioquia
Dos menores de edad cayeron al río Atrato mientras se movilizaban en una canoa por el municipio de Vigía del Fuerte, ubicado en la subregión del Urabá antioqueño. La reacción inmediata de las autoridades evitó una tragedia. Ambos fueron rescatados por las unidades de la Armada Nacional que estaban inspeccionando la zona.
Los niños de ocho y diez años fueron arrastrados por las fuertes corrientes de este afluente que nace en El Carmen de Atrato y desemboca en el golfo de Urabá. Sus condiciones lo convierten en el tercero río con mayores capacidades de navegación del país, por detrás del Magdalena y del Cauca. El riesgo de los menores era inminente.
Ellos estaban montados sobre una embarcación que se ladeó por las condiciones climáticas en el área general de esta población. En las últimas semanas, se ha presentado un incremento en su caudal por las fuertes precipitaciones que se han descargado, antesala de la segunda temporada de lluvias, que se extenderá desde septiembre hasta diciembre.
Ahora bien, las unidades del Batallón Fluvial de Infantería de Marina número 16 se encontraban realizando patrullajes de registro y control fluvial en cercanías del municipio. Desde la lejanía observaron la canoa en emergencia y, a unos pocos metros, a los menores que estaban siendo arrastrados por el inclemente caudal del Atrato.
Luego de implementar varias técnicas, los niños se pudieron mantener a la vista de los uniformados mientras lograban acercarse a ellos.