En las últimas horas, un trágico accidente de tránsito en la subregión del Catatumbo, Norte de Santander, acabó con la vida de un reconocido médico de la ciudad de Cúcuta. Al parecer, la víctima habría tomado esta vía con la intención de viajar a visitar a sus hijos.
Se trata del médico Marco Gómez Barrios, de 39 años, quien chocó su camioneta marca Peugeot de placas EHP-867 contra un bus intermunicipal en el sector conocido como La San Juana, en la vía Cúcuta-Ocaña, en hechos ocurridos la tarde el miércoles 21 de diciembre. El carro en el que se desplazaba el médico quedó completamente destruido.
Tras presentarse el fatal accidente, las autoridades arribaron al sitio de la emergencia para realizar las respectivas pesquisas. Se presume que la causa del siniestro sería un microsueño por parte del profesional de la salud.
Este hombre era un médico internista y trabajó en la clínica San José y en la Médico Quirúrgica de la capital de Norte de Santander por varios años, donde será recordado por siempre por ser muy enfocado en su profesión y servicial. Desde ayer hay dolor y consternación en Cúcuta tras el deceso de este médico.
Hasta noviembre de este año, Cúcuta era una de las ciudades con más casos de personas fallecidas en accidentes de este tipo. Hasta el mes pasado sumaban 70 los fallecidos en siniestros viales en capital de Norte de Santander, seguidos de Ocaña con 16, Villa del Rosario con El Zulia con 13 y Tibú junto a Sardinata con 12.
De igual forma, un informe del Observatorio Nacional de Seguridad Vial señala que el rango de edades en el que se registra la mayor tasa de mortalidad está entre los 15 a 30 años (59 hombres y 10 mujeres). Además, durante el día, entre las 6 p.m. a 8:59 p.m. se reporta la mayor cantidad de accidentes (103) .
Los fines de semana, se han convertido en los días donde más personas pierden la vida, y donde muchos conductores son sorprendidos manejando bajo el estado de embriaguez.
Terror en el Catatumbo
De otro lado, nuevamente vuelve la zozobra a la subregión del Catatumbo, donde por años se ha visto sumergido en la guerra entre los diferentes grupos armados que delinquen en este territorio.
A través de redes sociales están denunciando la presencia de disidencias de las Farc que, al parecer, estarían patrullando las calles del municipio de Tibú, saludando a la comunidad de la vereda Bertrania, según pudo confirmar SEMANA.
Los delincuentes ya no se esconden, menos en las zonas de conflicto como este territorio fronterizo con Venezuela, en donde ahora se mueven como dueños y señores en la región, al punto que en esta época decembrina caminaron con un fusil en una mano y con un calendario en la otra.
Los miembros de la estructura 33 de las disidencias de las Farc no solo patrullan ejerciendo el presunto control territorial, sino que ahora hasta aprovecharon las fiestas de fin de año para entregar almanaques con publicidad de ellos a la población.
Así lo confirmó este medio con autoridades de la región, al conocer la fotografía que circula en distintos medios, en la que se ven hombres de esta organización criminal, con brazalete de identificación en sus brazos, pasando por los barrios de Tibú y entregando de mano en mano estos elementos a la comunidad que se ve obligada a recibirlas.
“Estos hombres estuvieron como un aproximado de 10 a 12 minutos en este punto, efectivamente se fueron rápido, ya que es zona rural que cuenta con presencia del Ejército”, señaló una fuente de la Policía de Norte de Santander a SEMANA.
“Esto lo hicieron con el propósito de llamar la atención y crear zozobra en la población en busca de reclutar jóvenes, porque eso es lo que están buscando. Cuando llegamos al sitio ya no estaban”, recalcaron las autoridades.