Acabó la pesadilla. En las últimas horas se confirmó que Roque Bayona, quien había sido secuestrado en zona rural del municipio de Ocaña (Norte de Santander), fue dejado en libertad. Al parecer, un grupo armado al margen de la ley sería el responsable de este hecho.
Bayona, un hombre vinculado al gremio transportador de esa región, fue liberado en un paraje del municipio de El Tarra en la zona del Catatumbo, presuntamente, luego de que su familia llegara a un acuerdo con los captores. Por fortuna, fue hallado en buenas condiciones de salud.
Este hecho se presentó en horas de la tarde del lunes 23 de mayo, en la vereda Venadillo, zona rural del municipio de Ocaña, Norte de Santander, hasta donde llegaron hombres fuertemente armados que ingresaron al predio de Roque, de 70 años, y se lo llevaron a la fuerza con rumbo desconocido.
Aunque Roque Bayona puso resistencia, gritó pidiendo auxilio, los secuestradores lograron su cometido. Enseguida los moradores del sector dieron aviso a las autoridades competentes sobre lo que había ocurrido, quienes de inmediato desplegaron un dispositivo por toda la región, pero durante más de un mes no fue posible dar con su paradero.
El agricultor permaneció en cautiverio durante 35 días; al parecer, en ese lapso lo habrían retenido en zona boscosa del Catatumbo, donde delinquen varios grupos criminales al margen de la ley, como lo son el ELN y GAOr-E33.
Tras este hecho, se activó la ruta de atención psicológica para los familiares, con el objetivo de garantizar los derechos que se le están vulnerando al transportador, según dijo la Defensoría del Pueblo de Norte de Santander.
Para algunos defensores de los derechos humanos, resulta preocupante la situación que se presenta en la región del Catatumbo, donde el secuestro ha afectado a tantas familias, principalmente en municipios como Ocaña, Convención, Tibú y Abrego.
“Por eso pedimos a las autoridades que los dispositivos que refuerzan la seguridad en la región sean permanentes, no podemos seguir permitiendo más ataques que alteren el orden público”, indicó a SEMANA Diego Villamizar, defensor de los derechos humanos en la región.
Así mismo, el defensor le aseguró a este medio que la situación de seguridad y orden público es preocupante para los pobladores del Catatumbo, pues manifiesta que en lo corrido de este año se han presentado más de 100 acciones terroristas contra las autoridades en el departamento.
Este fin de semana, también quedó en libertad la comerciante Gladys Cancino, quien había sido secuestrada el pasado miércoles 22 de junio en el municipio de Tibú (Norte de Santander).
De este caso se conoció que hombres fuertemente armados llegaron en motocicleta hasta el trabajo de esta mujer y se la llevaron con rumbo desconocido. De inmediato, se encendieron las alarmas en esta región del Catatumbo, donde en lo recorrido de este año ya se han presentado varios casos similares.
Los hijos de esta mujer nortesantandereana expresaron en un video difundido por redes sociales el agradecimiento por su liberación.
“Queremos darle las gracias por el apoyo, no tenemos palabras en este momento, estamos súper felices, nuestra mamá se encuentra bien de salud y ya está descansando”, aseguraron los Cancino.