En las últimas horas, se presentó un posible atentando en la frontera que conecta a la ciudad de Cúcuta (Norte de Santander) con el estado Táchira (Venezuela), que dejó el saldo de seis personas heridas.

Los hechos se presentaron en el municipio venezolano de Pedro María Ureña, sobre las 9:40 de la noche del domingo 22 de enero, cuando un grupo de personas se encontraba departiendo en un establecimiento de venta de bebidas embriagantes, ubicado en la Avenida Intercomunal.

Ante esto, funcionarios de Protección Civil y del Cuerpo de Bomberos de esta población, atendieron la emergencia y trasladaron a los lesionados hasta el Centro de Especialidades Médicas Ureña y al Centro Diagnóstico Integral (CDI).

De acuerdo con las autoridades, se trata de tres hombres y tres mujeres, los cuales fueron identificados como: Jossua Rico, Brayan Suárez, Johan López, María Gelvez, Wendy Leal y Genesis Pabón.

Los afectados fueron identificados. | Foto: Diario La Nación

Sin embargo, se pudo detallar que dos de los heridos debieron ser trasladados hacia territorio colombiano por el puente internacional Francisco de Paula Santander, tras la gravedad de las lesiones, donde permanecen con pronóstico reservado.

Por su parte, las autoridades venezolanos se encuentran realizando las investigaciones y actos urgentes tras este hecho que alteró el orden público, donde posiblemente iba dirigido contra el propietario de este establecimiento.

Se desconoce contra quién iba dirigido el atentado. | Foto: Diario La Nación

Seguridad en la frontera

La Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc) dio a conocer que se intensificarán los operativos de seguridad en toda la ciudad y su área limítrofe, con el fin de brindar las garantías necesarias a los propios y visitantes.

“Estamos haciendo presencia en el puente Atanasio Girardot para trabajar en esta área que hoy podría tener la mayor demanda en tránsito, por lo que el compromiso es mantener los controles de vigilancia en este sector”, señaló el coronel Juan Carlos Ramírez Chaves, comandante de la Mecuc.

Durante estos primeros días de reapertura, las calles de Cúcuta se visten de hermandad, donde miles de vehículos arriban a la ciudad sin ningún tipo de inconveniente, tendiendo en cuenta algunos requerimientos como el seguro del carro y otros documentos establecidos por los dos gobiernos.

Así mismo, se mantiene una mesa de seguridad por parte de la administración municipal, a través de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, donde buscan mitigar el represamiento de vehículos que se puede generar en los próximos días.

Por su parte, Alejandro Martínez, secretario de Seguridad Ciudadana, mencionó que se espera que con esta nueva medida de paso formal entre ambos países, se disminuya el hurto a vehículos y las situaciones de inseguridad.

“Han sido más de tres meses con estas mesas de trabajo para evitar los diferentes impactos y una de estas es la seguridad. Principalmente, lo que se busca es prevenir acciones delictivas y reaccionar de la manera más oportuna”, puntualizó el funcionario.

De acuerdo con las bases de datos del Runt, en Cúcuta hay 75.000 vehículos matriculados, de un total de 450.000 que pertenecen al área metropolitana, por lo que las autoridades buscan nuevas estrategias de movilidad que permitan mitigar esta situación.

Estas propuestas serán socializadas en la Mesa Técnica Nacional para ponerlas en consideración del alto Gobierno y con eso seguir consolidando la apertura de la frontera con Venezuela que se constituye como una oportunidad histórica para este departamento.

Así mismo, se estudia la posibilidad de un pico y placa metropolitano que permita mitigar la demanda de automóviles que está ingresando desde el vecino país a partir del primero de enero.

“Con los alcaldes del área se está discutiendo un pico y placa metropolitano, esperamos que los otros municipios muy respetuosamente nos acompañen porque la llegada de miles de vehículos podría generar traumatismos en la movilidad en general”, señaló Jairo Yáñez, mandatario de los cucuteños.