En la ciudad de Cúcuta y su área metropolitana hay indignación por un caso particular que involucra a la Guardia Nacional Bolivariana de Venezuela porque, supuestamente, habrían impedido el paso a una niña de cinco años que requería ser trasladada a una clínica en territorio colombiano.

El hecho se presentó el pasado miércoles 30 de noviembre sobre las 5:00 a. m. en inmediaciones del Puente Internacional La Unión, que comunica a Boca de Grita, municipio de García de Hevia del estado Táchira (Venezuela), con el municipio de Puerto Santander, del lado colombiano.

La menor de edad venía en una ambulancia junto con un familiar proveniente de La Fría, capital del mencionado municipio. La víctima estaba conectada a una bombona de oxígeno la cual tuvo que ser desconectada para poder cruzar el puente debido a que los guardias venezolanos impidieron el paso del vehículo.

Sin embargo, la niña no resistió y murió en la mitad del puente cuando era trasladada en una carretilla de madera que usualmente es utilizada para transportar mercancía de un lado a otro. La madre alcanzó a cruzar hasta Puerto Santander, pero su hija ya estaba sin signos vitales, por lo que se regresó a territorio venezolano.

El argumento de los militares es que el puente está cerrado para el paso vehicular particular, donde sus familiares reprochan esta negligencia y hacen un llamado al Gobierno de Venezuela a tomar cartas en el asunto para evitar otra situación como estás.

Ante este caso, el gobernador del estado Táchira, Freddy Bernal, se refirió a los hechos y aseguró que iniciará una investigación con los guardias de turno que estaban ese día en la frontera; además, mencionó que este tipo de circunstancias no pueden pasar ahora que existen buenas relaciones con el Gobierno de Colombia.

“Yo sé que no está regularizado el paso, pero por encima del deber está el sentido común y el sentido común indicaba que esa ambulancia tenía que pasar. Yo le pedí al general Rosales que inicie una investigación al respecto y se determinen las responsabilidades del caso”, señaló Bernal.

De acuerdo con el gobernador, este tipo de situaciones que comprometen a la vida de una persona deben sobrepasar las leyes, pues aseguró que si le hubiesen pedido el permiso correspondiente, él hubiese autorizado.

“Entiendo que no hay el paso formal, pero cuando se trata de una vida humana, en mi criterio, hay que hacer algo más allá de la formalidad y desde ese puesto fronterizo no les costaba informar al general Rosales, que me hubiese informado a mí y hubiésemos autorizado el paso”, puntualizó el mandatario del Táchira.

Por otro lado, el diputado del Consejo Legislativo de ese estado, Miguel Reyes, mostró su preocupación debido a que diariamente miles de venezolanos tienen que cruzar la frontera en busca de tratamientos médicos.

“Son más de 7.000 tachirenses que semanalmente tienen que ir a la República de Colombia, a la ciudad de Cúcuta, a recibir asistencia médica en el área de radioterapia, quimioterapia y diálisis, ellos caminan kilómetro y medio, de ida y vuelta, ¿por qué someterlos más a esa tortura?”, argumentó el diputado.

Así mismo, le hizo un llamado especial directamente al presidente Nicolás Maduro a tener empatía con este tipo de situaciones, sobre todo cuando ya se ha anunciado un restablecimiento de relaciones entre ambos países.