¡Liberaron a Don Chepe! Así se dio a conocer este martes, 3 de octubre, la liberación del reconocido comerciante José Lisímaco Serrano Vaca, de 77 años, quien había sido secuestrado en el municipio de Ocaña, Norte de Santander.
Esta acción violenta se había registrado el pasado 22 de septiembre, en el barrio Santa Ana, donde hombres armados irrumpieron en su casa y lo obligaron a irse con ellos, al parecer, a la zona montañosa de la subregión del Catatumbo.
Don Chepe, como es conocido en este territorio, se dedica al comercio de cacao en la plaza de mercado público de dicho municipio. Por fortuna, ya se encuentra nuevamente con su familia y está siendo valorado por médicos.
Por su parte, las autoridades de Norte de Santander se encuentran investigando quién estaría detrás de este hecho, un flagelo que tiene atemorizada a la comunidad ocañera.
Secuestraron a ingeniero ambiental en Ocaña
Un nuevo caso de secuestro se registró en el departamento de Norte de Santander. En esta oportunidad la víctima sería un empresario e ingeniero ambiental. Las autoridades se encuentran investigando el caso.
El hecho se presentó cuando Fabián Camilo Arias Castilla se encontraba saliendo de un gimnasio, ubicado en el barrio Primero de Mayo del municipio de Ocaña y fue intimidado por desconocidos.
De acuerdo con las autoridades, los secuestradores llegaron a bordo de una camioneta y obligaron a su víctima a subir al vehículo, para luego llevárselo al parecer con rumbo hacia la zona montañosa de la subregión del Catatumbo.
De manera preliminar se pudo conocer que este rapto ocurrió contra el hijo de un reconocido comerciante de la industria farmacéutica de la región. Sin embargo, se adelantan las investigaciones para esclarecer los hechos.
Hasta el momento se desconocen quiénes serían los responsables de esta acción violenta, que las autoridades no descartan se trate de un posible secuestro extorsivo como se ha presentado en otros casos.
Durante este año, Ocaña ha vivido bajo la zozobra y el miedo a raíz de múltiples secuestros, por lo que la comunidad en general pide seguridad en este municipio al norte del departamento, donde delinquen el ELN, Los Pelusos, las disidencias armadas, bandas criminales, bandas delincuenciales, entre otros grupos al margen de la ley.
Atacaron con granadas a personal médico en Hacarí
Una vez más los actores armados causan temor entre los habitantes de Norte de Santander. Durante este fin de semana se registró un ataque con explosivos contra el personal médico del municipio de Hacarí, ubicado en la subregión del Catatumbo.
La Policía de la localidad reveló que sujetos desconocidos lanzaron un artefacto explosivo hacia la vivienda donde reside un grupo de médicos, ubicada en el casco urbano del municipio. Milagrosamente, los profesionales de la salud lograron salir ilesos.
“En el municipio de Hacarí, este fin de semana, estuvimos en una residencia, donde viven integrantes del hospital municipal, a quienes les lanzaron un artefacto explosivo para intimidarlos”, aseguró el mayor Daniel Sastoque, comandante del segundo distrito de Policía de Norte de Santander.
Los delincuentes, según las autoridades, lanzaron una granada de aturdimiento, la cual ingresó por una de las ventanas de la vivienda. “No (se) registraron lesiones y por parte de la estación de Policía les han brindado recomendaciones de seguridad. Ellos manifestaron que no han recibido amenazas”, agregó el mayor Sastoque.
Ante esta situación, la Policía solicitó a la comunidad suministrar información que permita esclarecer este hecho, así como los responsables del mismo. También hizo un llamado a los violentos a respetar la misión médica y permitir el libre desarrollo de las actividades en beneficio de la comunidad.
“Cualquier información que los ciudadanos nos suministren, será importante para avanzar con los procesos de investigación. Invitamos a las personas que intentan intimidar al personal médico a que respeten la misión médica que ellos están realizando, lo cual permite la atención a la ciudadanía vulnerable de este municipio”, sostuvo el comandante.
Por su parte, los habitantes del municipio de Hacarí piden a las autoridades intensificar las labores de patrullaje en todos los sectores, para evitar que situaciones como estas se vuelvan a presentar, tanto en contra de los médicos como de los mismos ciudadanos.