Nuevamente, vuelve la zozobra a la subregión del Catatumbo, que está ubicada en Norte de Santander, donde por años se ha visto sumergido en la guerra entre los diferentes grupos armados que delinquen en este territorio.
A través de redes sociales están denunciando la presencia de disidencias de las Farc que, al parecer, estarían patrullando las calles del municipio de Tibú, saludando a la comunidad de la vereda Bertrania, según pudo confirmar SEMANA.
Los delincuentes ya no se esconden, menos en las zonas de conflicto como este territorio fronterizo con Venezuela, en donde ahora se mueven como dueños y señores en la región, al punto que, en esta época decembrina, caminaron con un fusil en una mano y con un calendario en la otra.
Los miembros de la estructura 33 de las disidencias de las Farc no solo patrullan ejerciendo el presunto control territorial, sino que ahora hasta aprovecharon las fiestas de fin de año para entregar almanaques con publicidad de ellos a la población.
Así lo confirmó este medio con autoridades de la región, al conocer la fotografía que andan circulando, en las que se ven hombres de esta organización criminal, con brazalete de identificación en sus brazos, pasando por los barrios de Tibú y entregando de mano en mano estos elementos a la comunidad que no le queda de otra que recibirlas.
“Estos hombres estuvieron como un aproximado de 10 a 12 minutos en este punto, efectivamente se fueron rápido, ya que es zona rural que cuenta con presencia del Ejército”, señaló una fuente de la Policía de Norte de Santander a SEMANA.
El descaro y propiedad con que opera este frente, que en el pasado fue uno de los que más terror sembró y más rentas ilícitas le generó a la guerrilla por su relación directa con el negocio criminal del tráfico de drogas, no es nueva.
“Esto lo hicieron con el propósito de llamar la atención y crear zozobra en la población en busca de reclutar jóvenes, porque eso es lo que están buscando. Cuando llegamos al sitio ya no estaban”, recalcaron las autoridades.
Tras esta situación, los defensores de los Derechos Humanos en este departamento hacen un llamado especial ante las expectativas que se tienen una vez se logre restablecer estos diálogos, pues esperan que este proceso no sea como los anteriores.
“Nos preocupa la presencia de estos grupos terroristas que solo buscan generar zozobra en la población civil, estos hechos ya se volvieron recurrentes en la zona, existe una total ausencia del gobierno nacional en materia de seguridad, hemos hablado con la fuerza pública en la región y manifiestan falta de articulación desde el Ministerio de Defensa, inclusive las tropas en el área se encuentran desmoralizadas ante las limitaciones de realizar operativos militares, con la excusa de los diálogos y la mal llamada paz total”, puntualizó en SEMANA el defensor Diego Villamizar.
Asimismo, el defensor mostró su preocupación debido a que señaló que en lo corrido de este año se han presentado más de 100 acciones terroristas contra las autoridades en esta región, por lo que pide que este grupo armado debe anunciar un cese al fuego unilateral de todas sus actividades criminales y terroristas.
“Es un grave error para el Catatumbo lo que anunció el Gobierno nacional de suspender las órdenes de captura de miembros del ELN sin condicionar a esta organización, aunque con fachada de guerrilla. En la región solo son un grupo criminal que sus actividades ilegales son: el secuestro, extorsión y control de cultivos ilícitos y rutas del narcotráfico al servicio de carteles mexicanos y cartel de los soles que, entre otros, son manejados por generales de la guardia venezolana de la dictadura de Maduro”, expresó Villamizar en este medio.