Aunque pocos conocen el nombre de Brandon de Jesús López, cuando se hace referencia a su nombre artístico, Beéle, es claro que se trata de una de las estrellas en ascenso del mundo del reguetón, pero también una de las más polémicas. Beéle ha sido habitual protagonista de escándalos sentimentales y hasta una mujer trans confesó haber compartido con él “en todo sentido”, estando casado y con sus dos pequeños hijos. Ahora el reguetonero vuelve a ser noticia y no se trata de un éxito musical, esta vez tendrá que responder ante los tribunales con gravísimos señalamientos de su esposa Camila Andrea Rodríguez.
SEMANA revela en exclusiva el documento que ya está en poder de la Fiscalía en el que Rodríguez relata la pesadilla que ha tenido que vivir al lado de esta estrella musical, cuya situación afecta y tiene en alto riesgo a sus dos pequeños hijos. Consumo de drogas, incluso en presencia de los menores, violencia, humillaciones, abandono económico y hasta la prohibición de salir de su hogar a trabajar, forman parte de las denuncias contra este músico.
El documento de páginas describe cómo el interprete de canciones tan famosas como Loco y Si te interesa, y quien además ha hecho colaboraciones con artistas del nivel de Farruko, Nicky Jam, Sebastián Yatra, Andy Rivera, Natty Natasha, Manuel Turizo, según la denuncia, sería un maltratador y consumidor habitual de drogas en presencia de su familia, incluidos sus hijos.
Según fuentes cercanas a la joven esposa, abrumada por la situación que estaba viviendo, sin encontrar salidas porque su pareja ni siquiera le dirigía la palabra, le prohibió trabajar y salir de casa, decidió presentar la denuncia en la Fiscalía.
Se trata, como señala el documento, de “situaciones muy graves de violencia” que incluso se dieron, el mismo día que Camila Andrea Rodríguez volvió desde la clínica luego de tener uno de sus hijos y haber sufrido de preclancia y haber enfrentado un parto muy complicado.
“Mi representada recuerda con lágrimas en los ojos como durante sus partos, en el hospital y en grave estado de salud, el denunciado consumía en su presencia vaporizadores de marihuana. También recuerda cómo al regresar a la casa con su bebé recién nacido y después de un parto de alto riesgo en el que casi pierde la vida (sufrió preclamsia y un desgarre), el denunciado organizó una fiesta con varios amigos en donde todos consumían masivamente y de manera simultánea. Eventos estos en los que mi poderdante debía guardar silencio pues, repito, el único con autoridad en esa casa es él, en pleno ejercicio de la violencia psicológica y económica denunciada”, se lee en la denuncia.
Y es que ese es uno de los temas más graves de la denuncia que presentó la pareja de este artista urbano. Rodríguez es clara al describir en el documento “el denunciado Brandon de Jesús López “Beéle”, es un consumidor habitual de sustancias psicoactivas (principalmente hongos y marihuana hasta donde mi poderdante tiene conocimiento) y lo delicado es que está permanentemente consumiendo esas sustancias en la casa donde vive con mi poderdante y con sus hijos menores”.
A este escenario se exponen los hijos de artista y de Rodríguez en lo que seguramente será un gigantesco escándalo a los que ya está acostumbrado Beéle, con el agravante que en esta ocasión tintes penales, violencia intrafamiliar agravada y un inminente riesgo para dos niños.
La descripción es clara “mi representada y sus hijos deben convivir con estos productos que se dejan regados aleatoriamente en la casa, representando un riesgo latente para su vida, pues, por error, en cualquier momento uno de los niños podría consumirlos. Esto sumado al hecho de tener que tolerar los fuertes olores y humos que se producen en toda la casa, por cuanto el denunciado fuma sin ningún pudor en cualquier parte y, adicionalmente, sus sentidos se ven seriamente alterados por los hongos adquiriendo comportamientos que no garantizan la integridad de mi representada y de sus menores”.
La situación no es solo grave para los menores, también los es para su pareja, Camila Andrea Rodríguez, quien es sometida a reiteradas humillaciones y lo describe así: “además de haber sido invisibilizada en su propia casa, además de no tener absolutamente ningún recurso económico, de ser sometida a humillaciones, a veces con silencio a veces con términos denigrantes, también tiene vetado el ingreso a determinados lugares de la casa, porque así se lo ha prohibido el denunciado. Ella no puede entrar al tercer piso de la casa en donde al parecer tiene cultivos de sustancias prohibidas, ni a la habitación en donde pernocta el señor Brandon de Jesús López, Beéle”.
Resulta indignante que mientras la carrera de Beéle está en ascenso y gana toda una fortuna por sus presentaciones, decidió no pagar la educación de uno de sus hijos. “Ha sido tal el estado de humillación que mi representada y los niños no tienen un seguro médico porque el denunciado no lo volvió a pagar. Además, por más de que mi representada le ha rogado que el niño mayor ya está en edad de entrar al jardín, no ha querido pagarle la educación a su hijo”, se lee en la denuncia.
Los detalles son claros y explican por qué Rodríguez decidió romper el silencio y llevar el tema a los estrados judiciales. “Ha debido viajar intermunicipalmente en bus con sus dos menores hijos **** y ****, mientras el papá de los menores, un reconocido cantante de reguetón, viaja en aviones privados y derrocha el dinero en temas suntuosos, fiestas y mujeres”.
La situación económica de Camila, pese a los grandes recursos que recibe Beéle, es muy difícil y así lo ha dejado claro la jurisprudencia, tal como lo señala la denuncia “este ejemplo ideal de lo que la jurisprudencia de las altas cortes ha denominado “violencia económica” ha venido acompañado de una “violencia psicológica” que mina cada vez más la dignidad de la señora Camila quien, aunque está casada con un exitoso artista, lo cierto es que no cuenta en su día a día ni con el más mínimo recurso para comprar una botella de agua”.
La impactante denuncia, que describe una situación invivible para Rodríguez y sus hijos, concluye con la se ha visto expuesta a un claro escenario de violencia intrafamiliar de carácter psicológico, a partir de malos tratos, malas palabras, sometimiento a la voluntad del denunciado, imposibilidad de tomar decisiones económicas en el contexto familiar y hasta imposibilidad de movilizarse libremente al interior de su residencia.
SEMANA trató de comunicarse con Beéle a través de su celular y no respondió, le fueron enviados mensajes de texto que tampoco tuvieron respuesta. Unas horas más tarde se comunicó con este medio una persona asegurando que era su manager y que era necesario respetar los protocolos para comunicarse con el artista. Al señalarle que no se trataba de un concierto y que era un tema legal en el que era necesario hablar directamente con Brandon de Jesús López, se molestó, dijo que nunca nos daría una entrevista y tiró el teléfono.