José Eduardo Cavalcanti, publicista brasileño, más conocido como Duda Mendonça, se convirtió en protagonista del escándalo de Odebrecht en Colombia. De acuerdo con las grabaciones en las que se escucha a Óscar Iván Zuluaga, conocidas en exclusiva por SEMANA, él era la clave para evitar que el candidato y sus cómplices respondieran por la entrada de dineros de la multinacional del soborno a la campaña presidencial de 2014. Para ello, se diseñó un plan macabro.
“Duda está dispuesto a dar las declaraciones que se le han planteado, se está definiendo cuál es la ruta jurídica, que finalmente la plata se recibió y no se puede ya tapar”, dijo Zuluaga en una de las conversaciones que sostuvo con Daniel García Arizabaleta y que quedó en un audio, ahora en poder de la Fiscalía.
Fue, justamente, esa vinculación entre Duda Mendonça y la campaña Zuluaga presidente 2014 la que fue objeto de investigación de la Fiscalía en una nueva etapa del caso Odebrecht y que hace unas semanas se convirtió en el anuncio de imputación de cargos contra Óscar Iván y David Zuluaga, padre e hijo.
El mismo Zuluaga no dejó espacio para dudas. El publicista brasileño, que falleció en agosto de 2021, era fundamental para diseñar la estrategia de defensa del excandidato presidencial, su hijo y las directivas de la campaña. “Pero claramente va a salvar de responsabilidad, vamos a ver si lo confiesa esta tarde, a la campaña, a todos nosotros, la campaña no sabía de eso”, dijo Óscar Iván Zuluaga.
Sin embargo, ahora para la Fiscalía la conclusión es contundente y con pruebas en mano, como estos audios, se advierte que Odebrecht entregó a la campaña de Zuluaga 1′610.000 dólares a Mendonça como pago por los servicios de publicidad en la carrera por la presidencia de Colombia. Lo importante, de acuerdo con Zuluaga, era obtener una declaración del publicista que los excluyera de responsabilidad, así lo dejó, como evidencia, con su voz y en una charla con el exdirector del Invías. Integrantes de su equipo de defensa llegaron a Brasil y se ocuparon de contactar a Duda Mendonça y de vigilar que el plan se ejecutara.
“Dará un documento, no sabemos si va a hacer una declaración, digamos bajo una notaría, extrajudicial, como se llama acá, o producto de un cuestionario que le envíen los abogados, como opera en Brasil”, se escucha decir a Zuluaga.
El material de prueba que tiene la Fiscalía incluyó la evidencia de varias reuniones y los recibos de pago que se le hicieron al publicista. El representante de Odebrecht en Colombia, Eleuberto Martorelli, y Zuluaga se encontraron en Bogotá para acordar los aportes de la multinacional a la campaña y saldar la deuda que se tenía con Mendonça.
“Entonces, supuestamente no sé qué va a haber acá, pero tenemos que tratar de ver si Luis y Martorelli pueden colaborar en su declaración extrajuicio mandando un mensaje que ni la campaña ni nadie de la campaña sabía de eso”, dijo Zuluaga cuando insistió en la importancia de obtener las declaraciones de los empresarios brasileños.
El exministro de Hacienda y excandidato presidencial se mostró preocupado por lograr un contacto con los directivos de Odebrecht y allí nuevamente se incluía en la conversación el nombre de Mendonça.
Según Zuluaga, el hijo del publicista era la ficha para llegar a los brasileños, pero todo dependía de la reunión que tendría el excandidato con Mendonça en Brasil. “Hoy en la tarde por fin es la reunión con Duda, Duda desde la semana pasada aceptó, ya regresó a Bahía, él estaba en la casa de playa y Duda está dispuesto a dar las declaraciones que se le han planteado”, señaló Zuluaga mientras resaltaba la urgencia de una comunicación directa con ellos con el fin de definir la “estrategia” de defensa por medio de declaraciones extrajuicio enviadas desde Brasil.
En los audios, el excandidato presidencial advierte que Mendonça les aseguró que no haría nada que les “hiciera daño” a la campaña ni a sus directivas, esto luego de anticipar lo complicado que resultó llegar al publicista y conseguir la declaración que buscaba excluir de responsabilidad al excandidato y a su hijo, como gerente de la campaña.
“Eso ha sido un trabajo con toda la paciencia y la dedicación del mundo para que Duda tenga buena actitud, pero tiene una actitud buena, lo que él nos ha reiterado y dicho, yo no les voy a hacer daño a la campaña, ni a ustedes”, advirtió Zuluaga luego de explicarle a García Arizabaleta las reuniones de sus enviados a Brasil con el publicista de cara a “organizar” las declaraciones.
En la conversación con García Arizabaleta, Zuluaga insiste en las comunicaciones con los brasileños, de cómo contactarlos y que al hacerlo se puedan “orientar” las declaraciones, que vayan en una “misma línea” con el objetivo de “salvar” la campaña de toda responsabilidad.
“Digamos, esta semana debe haber una reunión... (hay que plantearle a Duda) si usted va a dar una declaración extrajuicio, salve de cualquier responsabilidad la campaña, vaya en esta misma línea, no sé qué documentos tengan ellos de comunicación entre Batista y Odebrecht en Brasil, en la época de la campaña”, advierte Zuluaga.
Además, insistió en que el dinero “cuadrado” entre Odebrecht y Mendonça no tenía por qué involucrar la campaña, por lo menos no de forma directa, en todo este escándalo. El excandidato advirtió que había problemas más graves como los sobornos y aunque dependían de la “actitud” de los brasileños, decía que estaba dispuesto a asumir el riesgo de contactarlos y de viajar a Brasil.
“¿A ellos de qué les sirve jodernos a nosotros? El problema nuestro no es de sobornos (...). Es una plata que se cuadraron entre ellos, ¿a ellos de qué le sirve meterse en esto?”, se escucha decir a Zuluaga mientras advierte, de manera firme, que las declaraciones de los brasileños serán fundamentales en este proceso.
Duda Mendonça era un fantasma en Colombia. Nadie sabía de su existencia hasta el escándalo de Odebrecht, cuando su nombre se conoció y, de paso, su trayectoria profesional, que lo ubicó como el “gurú” de la comunicación política. Fue Mendonça quien diseñó la estrategia que le dio la primera victoria al hoy presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva.
El excandidato presidencial entregó un detalle importante en medio del escándalo de Odebrecht, que ya golpeaba a varios países en Latinoamérica, incluido Colombia. Fue claro en advertir que los empresarios brasileños no tenían ningún requerimiento judicial en el país y, por tanto, no estaban obligados a declarar.
“Martorelli en São Paulo y el otro está en Bahía, no tienen orden de captura, no tienen nada, no los puede guardar la Fiscalía en Colombia, si ellos quieren no declarar, no declaran; no están obligados”, señaló Zuluaga.
Fuentes le confirmaron a SEMANA que, efectivamente, Zuluaga hizo llegar a la Fiscalía una declaración extrajuicio en la cual Duda Mendonça, desde Brasil, daba una versión que favorecía al excandidato presidencial y a su campaña, tal como lo habían acordado.