SEMANA reveló en las últimas horas apartes de la declaración del hacker Andrés Sepúlveda ante la Fiscalía General de la Nación, a la que debió asistir por petición de la defensa del expresidente Álvaro Uribe Vélez en medio de la investigación por supuestas chuzadas al proceso de paz.

Luego de la noticia, Sepúlveda publicó en sus redes sociales un video en el que confirma lo que anticipó este medio. Sepúlveda insiste en que no hay garantías de seguridad para él y su familia. Todo esto, además de negar que conoce al expresidente Uribe Vélez.

“Ahora que se me pide contar la verdad. Seguramente veamos nuevamente en medios a los funcionarios que tanto amaban las ruedas de prensa para acusar sin pruebas. Sus insoportables y vagos discursos sobre derecho nos aburrirán al son de nuevas denuncias y amenazas en mi contra. A pesar de las múltiples ruedas de prensa que miembros de la Fiscalía y el CTI dieron en aquel entonces acusando de varios cargos a miembros de campaña presidencial de Óscar Iván Zuluaga, el tiempo y la justicia demostraron que todos son inocentes y no hubo más ‘pruebas’ que mi testimonio”, escribió en su cuenta de Twitter.

Y agregó: “Más de 7 años después de aquel escándalo,se me pide que cuente la verdad sobre las presiones que sufrí por parte de un grupo de funcionarios poderosos de aquel entonces; los mismos sobre los que hoy pesan varias acusaciones y sospechas por montajes y corrupción durante su gestión. Me niego a seguir exponiéndome sin ningún tipo de garantía sobre mi seguridad personal y la de mi familia. El país sabe que en mi caso hubo muchísimas irregularidades muy graves, obvias y públicas que demuestran el poder de quienes en ese entonces (y aún hoy) me acusaron”.

SEMANA había ya conversado con Sepúlveda sobre el tema. Para él y su defensa, liderada por el abogado Juan Camilo Sanclemente, se estaría armando un nuevo montaje judicial para que no pueda declarar más.

Sepúlveda ha reiterado que nunca contó con garantías judiciales para ejercer su defensa, pues las personas que lo persiguieron “son reconocidos como líderes de varios montajes judiciales y casos de corrupción” y que, sin ningún tipo de protección, hoy le solicitan que se vuelva a enfrentar a ellos, a pesar de que hace seis meses pidió las medidas y le fueron negadas con excusas como que él estaba privado de la libertad. Dicha situación es contradictoria, pues Sepúlveda recuperó su libertad el pasado mes de diciembre de 2020 cuando se le vio, entre lágrimas, abrazando a su familia, después de los días que contaba de manera regresiva para salir de la celda.

De hecho, curiosamente, dos días después de esa declaración llegó a manos de Sepúlveda un documento reservado, firmado por el teniente coronel Héctor Jairo López, director de Protección y Asistencia de la Fiscalía, en el que, por segunda vez, le dicen que no se les va a dar protección ni a él ni a su familia.

“La competencia para brindar medidas de protección no corresponde a esta dirección, y resulta temerario afirmar que no se adelantó el procedimiento en debida forma, como usted subjetivamente lo asevera”, se lee. El documento agrega que la evaluación de amenaza y riesgo se hizo de manera meticulosa y que por eso son “infundadas” esas afirmaciones.

Sepúlveda quiere hablar, pero su defensa y él se preguntan si le brindarán las garantías necesarias.